TURISMO
Cuatro maravillas naturales a tan solo 47 kilómetros de Bogotá
Quebrada Honda y la cueva del Diablo son algunos de los secretos mejor guardados para visitar en Tocancipá.
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1. Parque Lineal Peñas Blancas
Cuenta la leyenda que los antiguos pobladores solían visitar este lugar para extraer de su cuenca canecas repletas de agua pura y cristalina. Un día el cauce se secó. Algunos creen que fue por obra de una presencia maligna y que a ella esta cueva le debe su nombre, pero en realidad, se bautizó así porque los nombres que evocan misterio resultan más atractivos. La cueva del diablo es hoy una locación natural muy visitada, en la vereda La Esmeralda, sector La Rejilla. Es una formación rocosa de más de 15 metros de profundidad donde se puede practicar senderismo.
2. Quebrada Honda o Agua Nueva
Tendencias
Foto: cortesía Nayive Yanken.
Esta quebrada forma una cascada de agua cristalina en medio de una vegetación de subpáramo y de bosque alto andino. Es un espacio ideal para conectarse con la naturaleza.
Algunos visitantes intrépidos suelen nadar en sus aguas frías. Otros prefieren hacer caminatas ecológicas con avistamiento de aves de la región, preparar un día de pícnic y disfrutar de un momento de tranquilidad.
Como recurso hídrico es de gran importancia y, aunque no es tan larga, de ella se desprenden una serie de quebradas que se conectan a una zona de páramo. La cascada está
ubicada en la parte alta de la vereda Canavita.
3. Cueva del diablo
Foto: Jorge Serrato.
Cuenta la leyenda que los antiguos pobladores solían visitar este lugar para extraer de su cuenca canecas repletas de agua pura y cristalina. Un día el cauce se secó. Algunos creen que fue por obra de una presencia maligna y que a ella esta cueva le debe su nombre, pero en realidad, se bautizó así porque los nombres que evocan misterio resultan más atractivos. La cueva del diablo es hoy una locación natural muy visitada, en la vereda La Esmeralda, sector La Rejilla. Es una formación rocosa de más de 15 metros de profundidad donde se puede practicar senderismo.
4. Hacienda Normandía
Foto: Nicolás Rocha.
Hace más de 150 años se construyó, a 5,6 kilómetros del casco urbano de Tocancipá, una casona colonial que hoy es uno de los sitios de descanso y recreación más icónicos del municipio. En este lugar la tradición, la historia y la naturaleza se mezclan para brindarles a sus visitantes una experiencia de relajación. Cuenta con ocho habitaciones y una capacidad de hospedaje para 20 personas. Los huéspedes planean de qué manera quieren vivir su estadía y para ello cuentan con una variada oferta de actividades que va desde cabalgatas, fabricación de quesos y mermelada, y cursos de parrilla, hasta una experiencia extrema de ciclomontañismo y parapente. Además, es un espacio adecuado para celebraciones y reuniones empresariales.