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12 de septiembre de 1994

TOMATES VERDES FRITOS
Jessyca Tandyy Kaffiy Bates protagonizan esta nostálgica evocación sobre la vida en cada una de sus etapas.
HAY NOVELAS que están escritas para ser llevadas al cine. Incluso muchas de ellas son más famosas en pantalla que en el libro impreso.
Así sucedió recientemente con la novela autobiográfica de Norman Maclean, trasladada al celuloide por Robert Redford y conocida en Colombia con el nombre de Nada es para siempre. Ahora ocurre lo mismo con Tomates verdes fritos, basada en la novela del mismo nombre de Fannie Flagg y convertida en película por Jon Avnet, quien marca su debut como director de largometrajes.
El título parece más bien el de una comedia, pero en realidad es la referencia nostálgica a un plato típico de un pequeño pueblo de Alabama. La cinta, por su parte, no tiene mucho de comedia. Es del mismo estilo de Nada es para siempre -está ubicada además en la misma época-; y es ante todo una humana y romántica historia rural, cruzada por instantes de drama y alegría; de triunfos y de derrotas, tal y como suelen ser todas las historias familiares.
Tomates verdes fritos transporta al espectador en el tiempo para que asista a los momentos más ensoñadores, dramáticos y edificantes de un pueblo de principios de siglo. La historia es relatada por una anciana que ha sido testigo de los acontecimientos remotos (Jessica Tandy) y ha encontrado en Evelyn (Kathy Bates) una amiga leal en quien confiar sus recuerdos.
En realidad son dos historias paralelas: la de la rebelde y aguerrida Idgie (Mary Stuart Materson) en el pueblo de Alabama; y la de Evelyn, quien aprende de las proezas de la legendaria Idgie para enfrentar su crisis matrimonial.
Por medio de una rica descripción de los personajes y una narración emotiva y espontánea, Avnet revuelve, los sentimientos del espectador con una historia fresca, colmada de nostalgia.
En última instancia, Tomates verdes fritos es una parábola sobre la vida en cada una de sus etapas, con todas sus alegrías, dificultades y temores. Es una película sincera, sin manipulaciones ociosas, y en eso radica el secreto de su grandeza.

UN POLICIA SUELTO EN HOLLYWOOD 3
Un Eddie Murphy cada vez más encasillado en uno de sus personajes.
EL ARGUMENTO siempre es el mismo: un policía de Detroit que entre la comedia y la acción, resuelve crímenes y atrapa malhechores en Beverly Hills.
La primera de la serie, Un detective suelto en Hollywood, fue un sonado éxito taquillero y recibió una nominación al Oscar como mejor guión en 1984. La segunda, en 1987, volvió a triunfar en los teatros, pero en esta ocasión la crítica no fué muy benévola.
Ahora llega la tercera parte, dirigida por John Landis (el mismo de Oscar y Los hermanos caradura) y basada también en resolver un extraño asesinato que lleva al protagonista hasta un fantástico pero sospechoso parque de diversiones. El parque es el centro de toda la trama y la oportunidad para que Eddie Murphy (encasillado en su personaje incluso en otras películas) saque a relucir su cuestionado talento como comediante.
Saturada de lugares comunes y situaciones inverosímiles mal construidas, Un detective suelto en Hollywood 3 no pasa de ser una floja comedia de temporada, ligera y poco emocionante. Murphy confirma sus penosas cualidades como actor y el director sus escasos recursos para llamar la atención. Uno que otra monería, uno que otro apunte bueno, no son suficientes para salvar la agonía de una serie que seguramente no aguante una cuarta parte.

'DR. JEKYLL Y MR HYDE'
Dos de los más sobresalientes actores del momento están por estos días en Escocia. Bajo la dirección de Stephen Frears, Jhon Malkovich y Julia Roberts están trabajando en la realización de Mary Reilly, una película del género fantástico terrorífico que rescata una antigua novela de R.L. Stevenson y que se hizo popular en el cine a comienzos de la década de los 40.
Se trata de una nueva versión del filme Dr Jekyll y Mr Hyde,
llevada a la pantalla por el director Victor Fleming, el famoso realizador de lo que el viento se llevó, en 1941, con la actuación de otro grande de la historia del cine: Spencer Tracy.
El talento multifacético de Malkovich, quien fué nominado recientemente por su papel de sicópata En la linea de fuego, unido a la candidez de Julia Roberts aseguran un buen contraste en esta próxima película que contará la historia de Stevenson,esta vez desde el punto de vista de la doncella del doctor.-