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Cruel y tierno

La Tate Modern, de Londres, ha inaugurado la más importante retrospectiva de fotografía realizada en el museo hasta el momento. ¿Cuáles han sido algunas de las imágenes más impactantes del último siglo?

29 de junio de 2003

Hay cosas que nadie hubiera visto jamás si yo no las hubiera fotografiado", declaró en alguna ocasión la norteamericana Diane Arbus, una de las más importantes artistas en este género del último siglo. Esta sentencia parece ser el mejor resumen de la muestra de fotografía Cruel y tierno, la más grande retrospectiva que ha hecho la Tate Modern de Londres y que estará abierta al público durante tres meses.

El nombre de la exposición surgió ante el calificativo que alguna vez recibió la obra del fotógrafo Walker Evans, famoso por sus retratos de campesinos en las regiones más olvidadas de Estados Unidos y por sus fotografías en el metro de Nueva York a personas que no sabían que estaban enfrente de una cámara. El aislamiento, la soledad y, muchas veces, la tristeza que reflejan sus fotos también parecen ser la característica del trabajo de otros artistas invitados a la muestra.

El ucraniano Boris Mikhailov ha captado imágenes de hombres y mujeres de su país que no tienen dónde dormir, el norteamericano Fazal Sheikh ha retratado a niños y mujeres que han tenido que huir de la guerra civil en Somalia, Robert Adams, en su serie El nuevo mundo, refleja el shock que sufrió tras regresar a Denver, su lugar de origen, y ver cómo los suburbios se expandieron y cómo la industrialización cambió la vida de una ciudad que él parece desconocer.

Cruel y tierno pueden ser los basureros que retrata Andreas Gursky pero que, gracias a su lente, ahora adquieren un nuevo carácter estético. El punto en común de los artistas escogidos, de acuerdo con Emma Dexter y Thomas Weski, los curadores de la muestra, es esa visión del mundo que ha producido imágenes imborrables para el hombre. No se trata de una exposición de fotografías sobre personajes famosos ni de eventos históricos. Es una mirada a cómo la sociedad se ha relacionado con su entorno, con los paisajes, con los procesos sociales. Es ante todo una muestra documental. "Nos interesó la oscilación entre rompimiento y compromiso, entre lo ideal y lo real, lo mítico y lo que es", dice Dexter. Hay, por lo tanto, fotografías de grandes centros comerciales, de paisajes, de supermercados, de calles, de suburbios, de fachadas de edificios que pueden reflejar esos cambios ocurridos en el último siglo.

La exhibición incluye también trabajos de Lewis Baltz, Bernd and Hilla Becher, Philip-Lorca DiCorcia, William Eggleston, Robert Frank, Lee Friendlander, Paul Graham, Nicholas Nixon, Martin Parr, Albert Renger-Patzsch, Thomas Ruff, Auguste Sander, Michael Schmidt, Stephen Shore, Thomas Struth y Garry Winogrand, la mayoría de ellos norteamericanos y alemanes. La exposición se lleva a cabo con la colaboración del Museo Ludwig de Colonia, en donde también se exhibirá en noviembre.