CUATRO MATRIMONIOS Y UN ENTIERRO<BR>VIAJE A LAS ESTRELLAS<BR>A RODAR

CUATRO MATRIMONIOS Y UN ENTIERRO
Con un guión inteligente y brillante reparto, esta comedia inglesa conquistó el difícil mercado gringo.

EN LOS ULTIMOS años, las únicas producciones británicas que habían logrado competir en el mercado norteamericano eran las del director James Ivory, el creador de Howard's End y Lo que queda del día. Sin embargo, el realizador Mike Newell ha logrado con Cuatro matrimonios y un entierro ingresar decorosamente en tan difícil medio. En Gran Bretaña ya se convirtió en la más taquillera de las producciones inglesas y en Estados Unidos recogió más de 50 millones de dólares, nada mal si se tiene en cuenta que la película costó cinco millones.

El éxito de la cinta no es gratuito. En primer lugar, está respaldada por un buen reparto, encabezado por Andie MacDowell -la protagonista de Greencard-, Hugh Grant -el inescrupuloso periodista de Lo que queda del día y quien se ha convertido en toda una revelación del cine mundial- y Rowan Atkinson, famoso por su interpretación de Mr. Bean en la serie de televisión del mismo nombre. En segundo término, sorprende la originalidad del argumento y la capacidad del director para mantener la atención del público utilizando prácticamente el mismo ambiente durante toda la película.

Cuatro matrimonios y un entierro narra exactamente eso: lo que le sucede a una familia y a un grupo de amigos durante cuatro bodas y un funeral. En medio de estas circunstancias nace una historia de amor entre una pareja demasiado liberal como para reconocer que se han enamorado perdidamente.

La sobresaliente caracterización de Hugh Grant, unida a la inteligencia del guión para hacer reír sin caer en lugares comunes, hacen de esta película una refrescante alternativa frente a las caricaturescas y manidas comedias norteamericanas.


VIAJE A LAS ESTRELLAS

TOM HANKS SE CONVIRTIO EN EStrella como comediante. Pero curiosamente, desde que protagonizó Un equipo muy especial, en la que interpretó a un neurótico entrenador de béisbol femenino, la comedia se ha quedado en el archivo por tiempo indefinido. Después vino Filadelfia, un papel serio que le hizo acreedor a un Oscar. Y luego, Fórrest Gump, un dramático filme intimista del director Robert Zemeckis que pronto se estrenará en Colombia.

Por ahora, Hanks se está dedicando a sacar adelante un proyecto que tenía en mente desde hace años: una aventura espacial. Dirigido por Ron Howard, el mismo de Un horizonte lejano, el versátil actor trabajará en Apolo XIII, una película sobre la accidentada misión de la Nasa cuyo viaje a la Luna fue interrumpido por una explosión en el módulo de comando, que puso en peligro la vida de tres astronautas y la salud de cientos de personas.



A RODAR
La próxima semana arranca una versión más del Festival de Cine de Bogotá.

Cataluña, clásicos del Brasil, derechos humanos, animación francesa películas de arte norteamericanas y un homenaje a Andrés Caicedo, son los principales invitados de este Festival, que abre una ventana a producciones cinematográficas ignoradas por la cartelera comercial.

Desde España llega una representativa muestra de la Escuela de Barcelona, un movimiento de los 60 que transformó el panorama del cine de la península. El constumbrismo o el panfleto se sustituyó por temas cotidianos, en el lenguaje contemporáneo de una generación que prefirió mirarse a sí misma en sus excesos, vicios y virtudes (Fata Morgana, Dante.). 40 años después, directores como Rosa Vergués y Bigas Luna retomaron estas banderas con escabrosos temas y lenguaje directo (Boom-Boom, Lota). Para completar esta muestra, el director catalán Ventura Pons viene a Bogotá con cinco películas y además será jurado de la competencia.

Y para no desentonar en los tiempos del sida, el Festival exhibirá una selección de películas sobre el tema promovida por la Red Educacional para América Latina.

En la muestra de derechos humanos cabe destacar la película argentina Tango Feroz, verdadero boom en el circuito de los festivales internacionales del año pasado. La retrospectiva del cine de animación francés recoge las películas más importantes de este género realizadas entre 1956 y 1992. El director René Laloux, además, dictará un seminario sobre animación.

Alemania trae una antología de la obra de Konrad Wolf, uno de los principales directores de la ex Alemania democrática, en la que se destaca Goya, la gigantesca coproducción germano-soviética filmada durante un año con actores de siete países.

En la muestra en competencia a la mejor ópera prima participan películas de España (La ardilla roja); China (El tambor que viene de la montaña); Brasil (Encontros imperfectos), además de películas de Grecia, Hungría, India, Rusia y Canadá.

Para rematar está la cuota colombiana de los realizadores, Colbert García, Carlos Rendón, Jorge Pinto, Erwin Goggez, Mauricio Cataño y, por supuesto, Felipe Aljure, el director de La gente de la Universal, una de las películas más controvertidas del pasado Festival de Cine de Cartagena.