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DESAYUNO A LA CARTA

La joven artista Diana Drews expone su más reciente trabajo en la Galería Espacio Alterno de Bogotá.

16 de diciembre de 1996

Con la serie 'Desayunos', Diana Drews alcanza una madurez conceptual que no deja de sorprender si se tiene en cuenta que es ésta su segunda exposición individual. En tan breve tiempo su búsqueda y exploración han encontrado un lenguaje propio y original que la hace ver como una prometedora artistas de su generación.La claridad de sus conceptos le ha servido para alcanzar una concreción de signos y una centralidad temática que, como el motivo y sus variaciones, desarrolla en un ámbito pictórico logrado en la forma y en el contenido aludido dentro de sus límites semánticos. Abstracta, pero no del todo; figurativa apenas como sugerencia, la serie posee una rara cualidad en el arte pictórico: el sutil oficio del humor y el decantado trabajo de la ironía. De ahí su delicadeza y su aparente fragilidad, pronto desmentida por una mirada atenta.Para esta mirada Diana Drews ha reservado la superposición de sus capas de sentido. Su propuesta es múltiple. Memoria y vida cotidiana, serialización y trasposición de los dominios de la acción plástica, la huella y el palimpsesto, los desplazamientos semánticos y el trabajo de las texturas, la composición y la confrontación con la materia que fue preciso dominar para alcanzar la trama de matices y colores con que la artista desarrolla el carácter pictórico de su obra. Así, en su conjunto, los cuadros integran su significado tanto ante la mirada como frente a la lectura de sus inscripciones, las cuales remiten a un marco de relaciones existentes que el espectador descubre como el hecho estético.Diana Drews demuestra suspicacia, elegancia y oficio, así como conceptos pictóricos plenamente manejados. Pero sobre todo en 'Desayunos' está el reflejo de una particular sensibilidad en el joven arte colombiano.