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Los Beatles entraron por primera vez al estudio de Abbey Road, en Londres el 6 de junio de 1962. De ahí salió su primer sencillo, ‘Love me do’. | Foto: AP

ANIVERSARIO

El año en que nació el rock

Hace 50 años comenzaron las carreras de Los Beatles, Los Rolling Stones y Bob Dylan. En 1962 estas tres leyendas cambiaron la historia de la música y hoy siguen brillando.

1 de septiembre de 2012

Tal vez los planetas estaban alineados de una manera extraña. O el mundo necesitaba un escape después de unas décadas oscuras. Quizá fue la primera vez que los jóvenes tuvieron libertad y capacidad económica. No se sabe exactamente cuáles fueron las razones, pero en 1962 empezaron, casi al mismo tiempo, las carreras de tres de los más grandes rockeros de la historia.

Los adolescentes John Lennon y Paul McCartney se conocieron en Liverpool en julio de 1957 y formaron un grupo llamado los Blackjacks. En ese momento la ciudad apenas se recuperaba de la Segunda Guerra Mundial pero, por ser un puerto importante, llegaban discos importados. Lennon y McCartney compartían gustos —sobre todo por Elvis Presley— y estaban decididos a cambiar la escena musical de su país. Un año después de fundar su banda, invitaron a su amigo George Harrison a que se uniera y, como los Silver Beatles, viajaron por toda Europa —en especial a Hamburgo, Alemania— para tocar en pequeños bares.

A finales de 1961 regresaron a su país y en uno de sus conciertos habituales en el bar The Cavern, conocieron a Brian Epstein, un respetado productor y crítico de música. Epstein —conocido como 'el quinto Beatle'— se convirtió en su manager e inició una agresiva campaña publicitaria.

En febrero del año siguiente, y ya con su nombre definitivo, Epstein les consiguió una audición en la disquera Decca Records. Los directivos los rechazaron porque, según ellos, los grupos 'con guitarras' ya habían pasado de moda. "Es tal vez el mayor error en la historia de la industria musical", le dijo Juan Carlos Garay, crítico de música a SEMANA. Sin embargo la popularidad de la banda crecía y George Martin, de EMI, los contactó.

El 6 de junio Los Beatles hicieron su primera grabación en el estudio de Abbey Road en Londres. La única condición que puso Martin para firmar un contrato fue remplazar al baterista Pete Best. Así, la noche del sábado 18 de agosto, Ringo Starr entró al grupo. Lanzaron su primer sencillo, Love me do, en octubre. El público lo recibió con cautela y Epstein decidió ir a las tiendas a comprar varios ejemplares, para que subiera en las listas de popularidad. En noviembre grabaron Please please me que se convirtió en su primer número uno. A partir de entonces empezó la consagración de los cuatro de Liverpool.

No muy lejos de ahí, una banda londinense intentaba tener la misma suerte. En 1960, Mick Jagger y Keith Richards, dos amigos de infancia, se encontraron en la estación de trenes de Dartford, después de muchos años de no verse. Jagger era estudiante del London School of Economics y Richards del Sidcup Art College. Los dos empezaron a hablar de música y descubrieron que tenían el mismo gusto por el blues y la música negra de Estados Unidos. Decidieron entonces formar una banda con amigos con la que durante varios meses estuvieron recorriendo bares, con muy poco éxito.

El 12 de julio de 1962 los propietarios del club Marquee los invitaron para reemplazar a una banda que había cancelado su presentación esa noche. Entonces alguien les preguntó su nombre. Brian Jones, otro de los integrantes, recordó el título de una de sus canciones favoritas de Muddy Waters y decidió usarlo: dijo que se llamaban los Rollin' stone.

Esa presentación, hace 50 años, es considerada el nacimiento de la banda más longeva de la historia. Sin embargo, en ese comienzo no fueron tan populares como sus colegas de Liverpool. Los meses siguientes buscaron contratos con pocos resultados. Varios de los integrantes originales se retiraron e ingresaron Bill Wyman (en diciembre) y Charlie Watts (en enero de 1963). Varios años más tarde, en 1975, llegaría Ronnie Wood. La banda contrató al joven Andrew Loog Oldham como manager. A pesar de sus 19 años, Oldham tenía ideas muy claras: les pidió que se dejaran el pelo largo, que fueran más rudos y que se cambiaran el nombre por Los Rolling Stones. Su idea de mercadeo era que se convirtieran en los niños malos de la música, en oposición a los adorables Beatles.

Fue Oldham quien ideó la supuesta rivalidad entre los dos grupos. Pero era ficticia: los dos eran muy cercanos. De hecho, uno de los primeros éxitos de los Rolling Stones, I wanna be your man, fue compuesto por Lennon, y George Harrison fue quien les consiguió su primera cita en una disquera. "Se reunían muy seguido a intercambiar ideas. Incluso se ponían de acuerdo en las fechas de lanzamiento de sus discos para no competir en ventas", le dijo el experto Eduardo Arias a SEMANA. El 7 de junio de 1963, Los Rolling Stones lanzaron su primer sencillo producido por Decca Records —que no perdió esta vez su oportunidad—, llamado Come on.

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Casi al mismo tiempo pero a muchos kilómetros de distancia, un joven judío soñaba con convertirse en músico. Robert Allen Zimmerman nació en Duluth, Minnesota, en 1941. A los 20 años se fue a vivir a Nueva York en busca de sus grandes ídolos: los intérpretes de música 'folk'. Zimmerman no sólo era un prodigio musical sino también un gran lector de la Biblia católica y de todo tipo de literatura. De hecho, en 1962 justamente, se cambió el nombre en honor a su poeta favorito, Dylan Thomas.

Ese mismo año, empezó a tocar en bares de la ciudad y se convirtió en una celebridad local. Entonces la disquera Columbia lo llamó para que grabara su primer trabajo con ellos. El disco, básicamente de música folk, apareció en marzo y tenía el mismo nombre que su autor: Bob Dylan. El álbum vendió muy pocas copias, pero él se convirtió en una figura de culto: algunas de sus canciones —muchas veces interpretadas por otros, como The Birds o Joan Baez— se convirtieron en himnos de su generación. En 1963 Dylan tomó la controvertida decisión de tocar la guitarra eléctrica, lo que lo convirtió en el más grande representante del folk-rock.

Dylan y Los Beatles se conocieron al poco tiempo. Lennon era un gran admirador del estadounidense —pues lo veía como un artista y no solo como un músico pop— y organizó una reunión a través de su amigo común Al Aronowitz, en el hotel Delmonico en Manhattan. Se rumora que en ese famosísimo encuentro Dylan les dio a probar la marihuana a Los Beatles y les habló de la importancia de las letras y de su individualidad como músicos. Sus palabras fueron tan fuertes que se dice que esa noche entraron a la habitación del hotel Los Beatles y salieron Paul, John, George y Ringo.

La relación entre los Rolling Stones y Dylan, en cambio, no está muy documentada. "No hay una amistad clara entre ellos. Pero es obvio que estaban muy al tanto de lo que cada uno hacía", le dijo a SEMANA el crítico Manolo Bellon. "Después de 1962, Los Beatles, Dylan y Los Rolling Stones tomaron caminos muy diferentes. Pero hicieron, a su manera, música que trascendía los temas banales. Supieron entender el espíritu de su tiempo y lo volvieron un fenómeno de masas", dice.

Estos tres gigantes hicieron música auténtica y honesta que cambió su época. Y, 50 años después siguen vigentes. La prueba es que Los Rolling Stones llenan estadios, Los Beatles siguen vendiendo millones y Dylan —quien lanzará disco el próximo 11 de septiembre— es un ícono de la música y la literatura. Nadie ha superado hasta ahora su impacto en la música popular y, por ahora, parece poco probable que alguien lo logre.