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EL DAMNIFICADO DE LOS ANGELES

Aparece esta semana la grabación del 'Concierto de los tenores'. Domingo y Pavarotti pasaron la prueba, pero Carreras dejó mucho que desear.

3 de octubre de 1994

EL SUPERCONCIERto de los tenores Domingo, Pavarotti y José Carreras en USA 94, en el estadio de los Dodgers en Los Angeles, fue tema de pronósticos. No era un secreto que el popurri de arias, canciones y romanzas trataba por enésima vez de demostrar al mundo quién era el primero.

Se daba por hecho que, como en Italia 90, sería Pavarotti. Sin embargo, la aparición del disco pone las cosas en claro. Hoy, con la grabación y ya sin la emotividad de la transmisión, tirios y troyanos reconocen que, a pesar de la superioridad del instrumento de Pavarotti, Domingo fue la medalla de oro. Hizo una jugada magistral en la selección de su repertorio, no se arriesgó innecesariamente y consiguió con su Amor, vida de mi vida la más alta cota musical de la noche. Pavarotti de todas formas se salvó.

No obstante, para José Carreras el balance es un desastre. A pesar de ser el menor del trío, sus condiciones son ya cosa del pasado. Hoy por hoy más de uno insinúa lo inminente de su retiro de las tablas. Hay quien asegura que perdió las calidades de su voz no por el tratamiento al que se sometió hace unos años para recuperarse de una aguda leucemia, sino por su desmedida ambición de abarcar un repertorio que jamás tuvo dentro de sus posibilidades. Incluso van más allá al calificar de audacia el pretender ponerse a la par con Domingo y Pavarotti.

Esto, sin embargo, lo tiene sin cuidado y ha firmado contratos hasta más allá del año 2000 y muchos teatros sufragan sin chistar los miles de dólares que cuesta una actuación suya. Además, ni siquiera toca el tema del retiro y en caso de que lo hiciese sería conveniente aplicar el adagio: "no creer en el retiro ni de políticos, ni de cantantes, ni de toreros".-

HOMENAJE PESO PESADO
VINCENZO BELLINI, EL 'CISNE DE Catania', es para los conocedores del bel canto el más inspirado compositor italiano. El máximo homenaje que se había rendido a su memoria era la instalación de su estatua en el fastuoso foyer del Teatro alla Scala de Milán, compartiendo apenas con Rossini, Verdi y Donizetti, lo cuatro pilares de la lírica italiana.

La Banca de Italia acaba de rendirle un homenaje sin precedentes al estampar su imagen en el nuevo billete de 5,000 liras que acaba de entrar en circulación. Este tipo de gestos en Europa no son cosa rara: Alemania lo ha hecho con Beethoven y Austria con Mozart, para apenas citar dos ejemplos. Lo que no tiene precedentes es que el reverso del billete tenga a Norma, la protagonista de su más popular ópera, el más difícil y exigente personaje de toda la lírica italiana, y también la ópera que ilustra el apogeo del bel canto, uno de los máximos momentos de la música italiana. Homenaje de mucho peso al compositor fallecido, prematuramente, a los 34 años, cuando se encontraba en el pináculo de su carrera.-

NOVEDADES
ROSSINI Y TANCREDI
HORNE, CUBERLI, PALACIO
CH. & ORCH DE LA FENICE, R. WEIKER
SONY CLASSICAL
COMO OPERA Tancredi basada en el drama de Voltaire, representó para Rossini su primera composición en alcanzar el reconocimiento europeo. Esta grabación proviene de una representación en vivo en el gran Teatro de la Fenice de Venezia en el año 1983, en conmemoración de los 170 años del estreno. La estrella es la mezzosoprano estadounidense Marilyn Horne, quien ratifica una vez más su lugar de primera intérprete rossiniana del momento. Su versión de la famosa aria Di tantipalpiti es magistral. A su lado están la soprano Lela Cuberli y el tenor peruano Ernesto Palacio. La ingeniería de sonido es impecable, así como la actuación de la orquesta, bajo la batuta de Ralf Weikert.

R. STRAUSS, W.A. MOZART
EIN HELDENLEBEN & SINFONIA #3
3 FILARMONICA DE VIENA, C. KLEIBER
SONY CLASSICAL
CADA ACTUACION del director Carlos Kleiber es un acontecimiento. Igual ocurre con sus grabaciones. Esta reúne los dos requisitos: reproduce una actuación suya al frente de la orquesta Filarmónica de Viena. El repertorio no es el de combate. En primer término, Ein Heldenleben, Vida de un héroe, de Richard Strauss. Kleiber la dirige con sentido de grandiosidad y la orquesta da una lección de buen hacer. En seguida, la Sinfonía #33 de Mozart. Aquí son especialmente evidentes los típicos tiempos de Kleiber, más rápidos que los de cualquier otro gran director de la actualidad, pero también su sabiduría. La obra discurre transparente, llena de vida y sin asomos de superficialidad. Es una grabación que hace meditar sobre el concepto de los conocedores que ven en este argentino-alemán al más grande director de la actualidad.


BRAHMS
SONATAS PARA VIOLIN Y PIANO
BRONGMAN Y STERN
SONY CLASSICAL
PARA EL amante de la música de cámara es un platillo de la más exquisita gastronomía musical: las tres sonatas de Brahms, recogidas en un solo disco grabado en vivo, obtenidas de una actuación en San Petersburgo. Los conocedores disfrutarán los términos del diálogo que a lo largo de la interpretación establece el viejo Stern en el violín, siempre controladísimo, sin permitirse un solo exceso, pero siempre jugando con los mejores ases, enfrentado a la impetuosidad del joven Bronfman, uno de los más fogosos pianistas de la actual generación de la escuela rusa. Una experiencia musical de altísima calidad.-