JUEGO DE LOCAL

Con una pequeña campaña liderada por el lema 'Unete a los locales', Carlos Vives decidió dar comienzo a las actividades de su sello discográfico Gaira con tres productos que, lanzados a fines del mes de noviembre, pasaron de alguna manera inadvertidos, un poco por ser esa la época en que el mercado de la música local se inclina por las lides tropicales. Lo curioso es que en estas tres producciones algo hay de eso, de tropical. Y se entiende de esa manera porque la primera intención de estos trabajos es la de rescatar el valor de la música colombiana con un patrón que ha sido común a las dos últimas producciones de Vives: la fusión del folclor con elementos más contemporáneos. La pequeña baraja se abre con El Bloque de Búsqueda, una extensión de La Provincia de Vives, sin la participación de Egidio Cuadrado y la incorporación de Iván Benavides, quien, junto al guitarrista Teto Ocampo, asumen un cierto liderazgo en este proyecto que se alimenta de sonidos del Pacífico y el Atlántico en una alianza bastante respetuosa con el rock. Respetuosa, porque tanto el elemento folclórico como el roquero se unen sin que la esencia de cada uno de ellos se pierda. Y en medio, una temática que se antoja urbana y realista, pero satírica y 'mamagallista' con piezas valiosas como No volveré, El hedor, Lo que sucede, Nena y el Rap del rebusque. De otra parte está Distrito Especial, la mejor de las bandas de rock bogotanas de la última década, y esta grabación que, como su título lo indica, es un Documento de lo que fue este trío que explora de manera divertida, pero muy seria, una conjugación de elementos musicales que ellos mismos bautizaron un día como el 'gastrofunk' y que permite el ingreso de sonidos autóctonos colombianos, especialmente caribeños y cercanos a la cumbia. Canciones como el Bus del blues, Candelaria, S.A.D. y CAI-Policía, hablan de su talento. Finalmente está Lucía, la otrora vocalista del dúo Iván y Lucía, con un disco de gran gusto por los ritmos caribeños y que la muestran en un papel cercano al de las cantadoras de la Costa. Un disco de excelentes orquestaciones, un cuidadoso trabajo percusivo y de gran significado en el rescate de esos valores musicales nacionales. Disco de exportación.