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Paddington 2

Por: Manuel Kalmanovitz G.

La nueva entrega de las aventuras de este oso, que mezcla animación digital y escenarios reales, es un oasis de tranquilidad y esperanza en un mundo convulsionado. ***1/2

País: Inglaterra

Año: 2017

Director: Paul King

Guion: Paul King, Simon Farnaby, a partir del personaje de Michael Bond

Actores: Hugh Grant, Sally Hawkins

Duración: 104 min

El ataque de lo urgente, lo inaplazable, lo preocupante está cada vez más intenso. Que un atentado terrorista en algún lado, que las bombas nucleares en otro, que la desinformación empujada por redes para que la gente ande indignada desde que se levanta hasta que se acuesta, que las catástrofes humanitarias y la corrupción al otro lado del mundo, en la ciudad vecina, dos cuadras más allá. Hay tantas cosas tan mal que ¿cómo pensar en algo más? ¿Será que la vida no es más que eso?

La respuesta, en este filme de un osito pacífico y lindo y amante incondicional de la mermelada de naranja, es que sí hay algo más, que además de lo trágico y terrible hay solidaridad, nobleza y sacrificios por los otros (y muchos sánduches de mermelada, también).“Que suena a excesivamente inocente”, dirán quienes prefieren pensar en el caos que viene. “Y qué”, se les podrá responder, “seguramente también habrá bondad”.

Esta es la segunda película reciente protagonizada por esta criatura icónica, creada en 1958 por el autor Michael Bond: peluda, con abrigo de paño y sombrero rojo de fieltro que se mete inocentemente en problemas de los que también sale inocentemente.

En esta entrega, el osito es acusado de robarle a un amigo anticuario un libro ilustrado sobre Londres, hecho por la dueña de un parque de diversiones ya fallecida, que le quería regalar a la osa que lo crio en su cumpleaños número 100. Así que mientras Paddington va a prisión, los Brown, su familia adoptiva, investiga quién pudo ser el verdadero culpable.

Además de su dulzura y buenas intenciones, la característica principal del oso es la torpeza que queda clara desde el comienzo, cuando lo muestra intentando limpiar todas las ventanas de su cuadra con el propósito de recaudar el dinero que necesita para el libro, pero que lo deja convertido en una esponja ursina. Es una torpeza que resulta siendo, también, su salvación de una forma muy particular.

Viéndolo me recordó esas situaciones extrañas en las que la rabia cotidiana se transforma en otra cosa. Como cuando uno se indigna por ver a alguien mal parqueado hasta que se da cuenta de que se varó y la rabia se bifurca, dejando una estela de compasión por el afectado y de vergüenza por haber malinterpretado la situación.

El efecto de estos momentos es poderoso y esperanzador, es darse cuenta de que las interpretaciones que hacemos pueden ser negativas en exceso, que somos innecesariamente malpensados, que hemos asimilado, casi sin darnos cuenta, toda esa desesperanza que resulta tan rentable y adictiva y que se mueve sin control por las redes sociales.

Yo sé que puede sonar exagerado hablar de todo esto a raíz de una película dirigida a un público infantil y protagonizada por este osito torpe y adicto a la mermelada de naranja, pero no importa (y ni siquiera he mencionado que aparece Hugh Grant haciendo un papel excesivo y cómico y deliciosamente sobreactuado). Es mejor acercarse al osito interior que andar por ahí viendo maldades donde a veces no las hay. n

CARTELERA

La forma del agua

***1/2

El romance entre una criatura marina y una mujer muda es el punto de partida de esta refinada película de Guillermo del Toro.

Las horas más oscuras

***

Una actuación impresionante de Gary Oldman muestra la indecisión de Winston Churchill ante unas posibles negociaciones con los nazis.

Un viaje maravilloso

***1/2

Dos historias, una en 1927 y la otra en 1977, se entretejen con elegancia en la nueva película de Todd Haynes.

I am not your negro

****

Fuerte documental sobre el racismo institucional de Estados Unidos, centrado en la figura del extraordinario escritor James Baldwin.