Home

Cultura

Artículo

C I N E

La gran estafa

En la nueva comedia de Steven Soderbergh 11 timadores de los de antes se enfrentan al robo más grande de sus vidas.

Ricardo Silva Romero
26 de febrero de 2002

Director:
Steven Soderbergh.
Protagonistas:
George Clooney, Brad Pitt, Andy Garcia, Matt Damon, Julia Roberts, Don Cheadle, Carl Reiner, Elliot Gould, Casey Affleck.

Es sobre un gran robo. Y nosotros, los espectadores, todo el tiempo estamos del lado de los ladrones. Disfrutamos con la forma como Danny Ocean, unas horas después de salir de la cárcel, reúne a un inolvidable equipo de 11 expertos para llevar a cabo su plan: entrar en la infranqueable bóveda de tres gigantescos casinos de Las Vegas y robarle un poco más de 150 millones de dólares a Terry Benedict, su dueño, un hombre frío, astuto, implacable, que merece perder esa batalla no tanto por el dinero —si todo sale bien, sólo perdería las ganancias de una noche— como por la soberbia con la que se enfrenta al mundo. Así es. Nos fascinará si pierde, pero sabemos que él está preparado para no perder jamás.

Los timadores de Ocean no son invencibles, pero juntos son un gran enemigo: Rusty Ryan es capaz de enseñarles trucos de cartas a las ingenuas estrellas de Dawson’s Creek, Frank Catton lo ve todo, Linus Cadwell entra y sale de los bolsillos sin que nadie se dé cuenta, Basher Tarr arma una bomba en dos minutos, Saul Bloom ya no está para esos trotes pero aún embauca a cualquiera, Livingston Dell es capaz de instalar cámaras y micrófonos en donde sea necesario, los hermanos Malloy son capaces de asumir cualquier personalidad que les toque y Yen, el acróbata chino, puede meterse en la caja que quieran y saltar de una esquina hasta la otra cuando lo prefieran.

Se trata de divertir. Nada más. El propio Steven Soderbergh, el director, que desde Sexo, mentiras y video hasta Tráfico no ha parado de hacer buenas películas, confirma la sospecha en un comunicado de prensa: “La gran estafa es un regreso al cine del pasado: jamás es cruel, jamás es gratuita, nadie muere, nadie es humillado sin razón ni es blanco de burlas. De cierta forma, tal vez sea la película menos amenazadora que haya hecho. Quería que fuera entretenida y liviana. Quería que fuera animada”. Sólo eso. Nada más. Habría que ver dos estupendos largometrajes sobre estafas, El Golpe, de George Roy Hill, y Sneakers, de Phil Alden Robinson, para entender del todo a qué tipo de cine se refiere.

Más que una segunda versión de la película protagonizada por Frank Sinatra, Dean Martin y Angie Dickinson, La gran estafa es su corrección. Para comenzar, cuenta bien una buena historia: confía tanto en el espectador que no se dedica a mostrar largos ensayos del robo sino que se centra por completo en la acción y en los divertidos diálogos entre sus personajes. Sin problemas reúne a algunos de los mejores actores de Hollywood, les da la oportunidad de encarnar personajes muy bien caracterizados y uno no siente, jamás, como suele ocurrir en este tipo de casos, que ellos son los únicos que se están divirtiendo. Como si fuera poco, nos recuerda, antes de que sea muy tarde, que Elliot Gould, Carl Reiner y Andy García son tres actores capaces de cualquier cosa. No debería pedirse más.