LA VERSION POPULAR

FALS BORDA ORLANDO. "Retorno a la tierra (Historia doble de la costa-4)".
Bogotá: Carlos Valencia Editores, 1986, 234 páginas.
A Orlando Fals Borda le gustan las metáforas; y así tiene un sentido especial para encontrarlas. Las metáforas que hacen parte del acervo de una cultura popular, sobre todo. Las metáforas tras las cuales se oculta una idiosincrasia, una manera de ser, la expresión callada de una región. Así encontró Fals Borda que expresiones casi legendarias como "el hombre hicotea" y "el hombre caimán", corresponden a características humanas y sociales presentes en una determinada región de la costa colombiana: la región de Mompox y Loba. Otras son metáforas de su invención, como la del "hormiguero", que le sirve al autor como imagen social de los campesinos costeños que "no se dejan" y que tienen la habilidad de "resollar como las hormigas" puesto que, tras la destrucción de sus madrigueras por parte de los "osos chuperos del gran terrateniente", regresan a reconstruir sus hormigueros.
Bajo esta imagen situada al final de su libro "Retorno a la tierra", Orlando Fals Borda desarrolla sus últimas conclusiones, con las que cierra la serie de los cuatro volúmenes de la "Historia doble de la costa". Aquí se recogen, como desplegados tras una larga cosecha intelectual, los frutos de su reflexión teórica y de su vivencia regional. Aquí, en esta meditación, se anima una prosa directa y combativa, aquí confluye la historia doble de la costa en una sola vertiente; y aquí se condensa el espíritu crítico y reivindicativo que recorre como un viento impetuoso esta historia plural de la costa.
Los cuatro volúmenes dan cuenta pormenorizada de la historia y del sentido de los conflictos y luchas agrarias de los campesinos de esta región, desde sus orígenes en la época de la Conquista, hasta nuestros días. La obra, polémica en su totalidad, confronta los poderes tradicionales en torno a la tenencia de la tierra, denuncia los desalojos, el latifundio, vuelve sobre los mitos y leyendas de la región, analiza y sugiere formas de organización social y política. Del oriente al occidente, del río Magdalena hacia el mar Caribe, Orlando Fals Borda ha escrito la minuciosa historia doble de la costa pero regresando siempre al origen que es Mompox y Loba.
El primer tomo, "Mompox y Loba", es una rica exposición acerca de la cultura anfibia de esta región, en la que se combina la actividad de la pesca con la agricultura, con las que pueblan sus campesinos productivamente la depresión momposina. El segundo tomo, "El presidente Nieto" , viene a ser una defensa de la vida del "ethos costeño" y su unidad cultural, ilustrada a través de una figura insólita en nuestra historia, la del presidente Juan José Nieto, quien representa la defensa de la vida a través de la contraviolencia como argumento. Este Presidente -zambo mestizo- no figura en los textos de historia, probablemente por razones de su origen, aunque gobernó el país durante los seis meses que dieron paso a la segunda Presidencia del general Mosquera. En el tercer tomo, "Resistencia en el San Jorge", están las estrategias de la resistencia popular y su manera de reproducirse cultural y socialmente, generando lo que en el libro se denomina el "hombre hicotea", el hombre que ha desarrollado hábiles mecanismos de defensa, con los cuales puede sobrevivir resistiendo, como la hicotea, frente a los avatares de la vida. Y en el cuarto tomo Fals Borda explica cómo se desarrolla, en la región del Sinú, lo que el autor ha llamado el "arraigo atávico del modo de producción parcelario", con su consecuente y necesario "retorno a la tierra".
Sin duda la obra de Fals Borda tiene el fuerte perfil político de su toma de posición. Pero no es de ninguna manera una obra teórica, destinada a la discusión en los círculos académicos, más bien son estudios para los campesinos, para afirmar una posición de resistencia ante la presión latifundista. Lejos de la torre de marfil del intelectual, en la "Historia doble de la costa" está sí,la reflexión teórica pero determinada siempre por la vivencia humana, por el discurrir de la vida ordinaria y la proyección de la mitología del pasado sobre la configuración del presente. De aquí la denominación de historia doble de la costa. Doble porque su autor la ha relatado con la impronta de una innovación formal: la obra discurre en dos canales; uno para la descripción y la anécdota, para la atmósfera y el relato; otro para la interpretación teórica que corresponde a ese relato, para el ajuste conceptual y metodológico y para las conclusiones más inmediatas. Esta innovación en la forma, en realidad se deriva del método que el autor utilizó para llegar a ella: son libros precipitados desde la vida misma de sus protagonistas. Fals Borda es en realidad el coautor y colaborador intelectual de un trabajo, en parte teórico, en parte testimonial, que refleja la versión popular de la historia.