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LA VOZ DEL SILENCIO

Uná visión bastante áspera de la mujer en la última obra de la brasileña Clarice Lispector.

6 de febrero de 1989

Clarice Lispector es una escritora desconocida en Colombia. Las poquísimas traducciones que de sus libros se han hecho al español, no se consiguen. La reciente edición de "Silencio", uno de sus últimos libros de cuentos es una oportunidad para leerla. Este ha sido publicado por Grijalbo con un prólogo de la argentina Cristina Peri Rossi.
Lispector nació en Ucrania en 1925, pero toda su vida vivió en Brasil y fue también allí donde murió en 1977. A los 19 años escribió su primera gran novela: "Cerca del corazón salvaje". Son también muy conocidas "Aguaviva" y "La pasión según G.H". Ha sido siempre comparada con Virginia Woolf porque su obra es una exploración del interior escrita en prosa poética.
"Silencio" es una recopilación de cuentos y fragmentos poéticos. El libro es un tanto difícil de leer no sólo porque en la mayoría de los textos no pasá nada, sino porque además en muchos de ellos no hay personajes. Los fragmentos son contados por la voz de una mujer solitaria que vive en la ciudad. Es una mujer seca y áspera, a la que le "duele el corazón como de amor por un hombre". La mujer de la obra de Lispector no es un personaje pasivo, ella habita el mundo teniendo las riendas de la vida por la mano. La forma de hacerlo es a traves de la escritura, por eso la palabra es una especie de cordón umbilical, y el escrito literario es el hijo.
Este tono polémicamente femenino de su obra es reforzado por el prólogo de Cristina Peri Rossi que dice: "Sólo una mujer puede estar tan pegada a sí misma, a su mirada, como para que esta unión umbilical (entre el texto y la escritora) sea indestructible".
La perspectiva femenina no es lo único novedoso de la obra de Clarice Lispector, es también importante su carácter formal. No es gratuito que en sus textos no pase nada, con esto se resalta la manera de habitar el mundo. Lo importante no es lo que suceda en el bus, camino a casa, porque generalmente no pasa nada. Lo que importa es lo que la mujer siente y piensa en este cámino que hace todos los días. En los fragmentos poéticos la voz de la mujer se mueve dentro de un pensamiento que parece sentado en medio del silencio. En este libro, como en los otros, Clarice no crea mundos, tan sólo muestra cómo los ve.
Es impresionante la sequedad y la aspereza de la mujer lispectoriana. El tratamiento de temas como la vejez es crudo en cuentos como "La partida del tren", donde se contrasta la soledad de una mujer vieja y de plata que va de un lugar a otro como un paquete que estorba, con la de una mujer joven que escoge dejar a su compañero. Se dice simplemente que "se llega a un cierto punto y lo que fue no importa. Comienza una nueva raza. Una vieja no puede comunicarse".
Otra cosa que caracteriza a este libro es que los escenarios de los cuentos parecen kafkianos. La ciudad está hecha de laberintos que no conducen a ninguna parte. El personaje de un cuento como "La búsqueda de la dignidad" se pierde en los subterráneos del estadio Maracaná, buscando alga que luego olvida y encontrando la simplicidad de su muerte.
La obra de la Lispector es polémica por su carácter de literatura femenina y compleja por su lirismo formal. Es difícil llegar a donde la escritora va El lector se siente del otro lado del abismo, aunque ella dé pistas como ésta: "En el último suspiro de alegría otra alegría, en la punta de la espada la magia; es allí a donde voy".