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L I B R O S

Las vidas de Fernando Pessoa

Una biografía que se constituye en la mejor introducción para conocer al gran escritor portugués.

Luis Fernando Afanador
30 de abril de 2001

Robert Brechon

Extraño extranjero

Alianza editorial, 2000

647 paginas

$ 120.000



Una biografía sobre el gran escritor portugués Fernando Pessoa. ¿Es posible? ¿Cómo hablar de un hombre que casi no existió, que además se escondió bajo la máscara de diversos autores inventados por él y diferentes entre sí?

Pessoa es un caso único en la literatura. Porque fue el pagano Alberto Caeiro, nacido en Lisboa, rubio y de altura media. El médico estoico y epicúreo Ricardo Reis, nacido en Oporto, bajo y moreno. El vanguardista Alvaro de Campos, ingeniero de un astillero de Glasgow, alto y flaco. Cada uno de ellos un poeta genial, con una obra autónoma. Pero también fue Bernardo Soares, el oscuro oficinista creador de la prosa suntuosa de El libro del desasosiego. Para sólo hablar de sus principales heterónimos, para no referirnos a sus ortónimos, a esos otros Fernando Pessoa que pueden ser el poeta lírico de Cancionero, el épico de Mensaje, el autor de versos en inglés, el gran poeta de elegías esotéricas y simbólicas, amigo del famoso ocultista Alesteir Crowley.

El dogma de la cultura occidental y cristiana es que tenemos ‘una’ personalidad y ‘una’ individualidad. Aunque atesoremos inmensas posibilidades mentales inexploradas. Aunque los neurólogos afirmen que apenas utilizamos una mínima parte de nuestra capacidad cerebral. La heteronimia practicada por Pessoa —cree Robert Bréchon— fue un método experimental para tener pensamientos, sensaciones y creencias nuevas, capaz de hacernos salir de la personalidad inmóvil que ha configurado nuestro carácter, nuestra educación y nuestra tradición. Paradójicamente, Pessoa quiere decir persona en portugués y, como se sabe, persona significaba personaje, máscara. “Soy un evadido. Desde que nací, me encerraron dentro de mí. Sí, pero me escapé”, dice Alvaro de Campos.

Entonces, ¿qué hacer en esa confusión en la que autor, vida y obra resultan difusas? La propuesta de esta biografía es la de hacer confluir todo el cortejo de heterónimos en un solo individuo, el único que tuvo cuerpo, estado civil y nombre verdadero: detrás de las máscaras siempre quedan pedazos de piel adheridos. Bréchon cree que conocer la vida del ‘Pessoa hombre’ no nos aleja de su obra sino todo lo contrario: “En su caso mucho más que en el de otros, la vida explica la obra tanto como la obra explica la vida. Se contienen mutuamente”. Y agrega: “No conozco otra vida de escritor tan carente, como tampoco otra que haya sido tan transfigurada por el arte”.

En un célebre ensayo sobre Pessoa, Octavio Paz decía: los poetas no tienen biografía, su obra es su biografía. Una frase sin duda muy bella pero hoy en día revaluada: corresponde a los años 60, al dogma estructuralista que desconocía cualquier explicación de la obra a partir del autor. No hacer distinciones entre vida y obra, ese es el principal acierto de este trabajo que termina siendo no sólo un compendio actualizado de erudición pessoana, sino la más confiable introducción para quien quiera conocer y entender a fondo al múltiple y laberíntico escritor.

Antes de la de Bréchon, existían cuatro biografías sobre Pessoa. La más importante, sin duda, es la de su discípulo Gaspar Simoes, publicada en 1950, la cual todos los estudiosos —incluido Bréchon— se apresuran a calificar como “monumental”, aunque abuse de un sicoanálisis para principiantes y haya dado comienzo a la figura de un autor maldito. Sin embargo, hay otro hecho decisivo que no pudo tener en cuenta Simoes y que ha cambiado toda la perspectiva de interpretación de Pessoa: la aparición, en el legendario baúl de sus manuscritos, de obras como Eróstrato (1966), Libro del desasosiego (1982), Fausto (1988) y The Mad Fiddler (1990). Y aún queda por estudiar y publicar la tercera parte de esa caja de Pandora.