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MENTES QUE BRILLAN

A los 28 años y luego de obtener el segundo oscar de su carrera, Jodie Foster debuta como directora.

8 de junio de 1992

CUANDO CUMPLIO su primer año de edad, ya sabía leer. A los siete. resuelve complejas ecuaciones matemáticas en fracciones de segundo Sin embargo, su máximo sueño es poder jugar básquet con sus compañeros de curso y hacer amigos. Fred Tate quiere tener una niñez normal, pero hay un obstáculo que se lo impide: es un genio.
Con esta historia, Jodie Foster realiza su primera película como directora. Con el respaldo de un guión escrito por Scott Frank, Foster intenta penetrar con el desolado mundo de los niños superdotados y en la problemática familiar que implica su educación.
En la película se reconocen dos polos opuestos que influyen en la vida de Fred: el de su madre (interpretada por Jodie Foster), quien lo ayuda a vivir su brillantez con humanidad; y el de la pedagoga Jane Grierson (Dianne Wiest), quien intenta explotar su racionalidad por encima de los sentimientos. En la mitad de la tensión resiste la soledad de Fred, quien no comprende todavía el porqué de su destino.
Sin muchas pretensiones, en medio de su sencillez en el desarrollo del conflicto, la actriz que conmovió al público en "El silencio de los inocentes" logra llamar la atención sobre un problema complejo. Aunque no pasará a la historia como una gran producción, Jodie Foster puede sorprender como directora en el futuro.