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ROCK NACIONAL EN DUDA

1280 Almas, La Derecha y Poligamia lanzan nuevos discos. Sin embargo el panorama del rock nacional no es claro.

28 de octubre de 1996

Que Shakira haya vendido más de un millón de copias, que Los Aterciopelados hayan tenido una gira exitosa por España y ahora estén grabando en Londres junto al famoso guitarrista y productor Phil Manzanera, que más de 45.000 jóvenes se hayan reunido en Bogotá para el cierre del festival Rock al Parque o que Compañía Ilimitada haya tenido una canción número uno a nivel nacional con el tema Santa Lucía, no son sinónimos de que la música joven -llámese rock o po- colombiana esté pasando por su mejor momento. La prueba de ello es que los anteriores son casos aislados. Igualmente, que en los últimos tres años sean contados los artistas nuevos que en este género musical han sido lanzados por las casas disqueras más importantes del país, que estas mismas empresas no estén dando un apoyo total a los pocos que lanzan un disco, que los buenos proyectos que se veían venir _en el caso bogotano_ se hayan acabado, como sucedió con los grupos Danny Dodge, Marlo Hábil, Catedral o Why Six, entre otros; que en Medellín, Discos Fuentes, con su sello Factory Records, haya recortado el número de artistas que manejaba y que la radio juvenil siga siendo exageradamente selectiva para dar cabida a estos productos en su programación, son el síntoma de que algo no funciona bien. Sin embargo todo esto contrasta con el elevado número de grupos que existen hoy en las principales ciudades del país y la cantidad de jóvenes que, semestre tras semestre, están ingresando a las facultades de música creadas recientemente por las principales universidades. Pero el movimiento musical juvenil colombiano no se puede detener, y prueba de ello es la aparición en el mercado de las más recientes producciones de los grupos bogotanos 1280 Almas, La Derecha y Poligamia, todos ellos planteando interesantes temáticas de corte social urbano que de alguna manera reflejan la realidad del país. La 22 es el segundo álbum de 1280 Almas, uno de los grupos con mayor número de seguidores en la capital. Su tendencia musical es en particular el ska con leves tintes de punk, una elevada carga rítmica y un buen manejo vocal de Fernando del Castillo. En esta producción el grupo ha hecho énfasis en la crítica urbana con letras crudas que por momentos hablan de desesperanza y dolor. La Derecha ha concretado Balas de bebé (y otras canciones de cuna), un disco que, a diferencia de su anterior, se muestra con un rock más crudo en el que la fusión vuelve a jugar un papel protagónico y que permite recurrir a una mezcla de humor y protesta como forma de mostrar la realidad en canciones como El hueco, Balas de bebé y Pórtate peor. Por su parte, Poligamia ha decidido construir una nueva imagen. Ganadores del concurso Notas Radioactiva hace cinco años, desarrollaron en su primer disco una línea pop muy definida en la que las baladas jugaban el papel protagónico. Su segunda producción, más madura, los mostró en una evolución que logra su punto más alto ahora con Promotal 500 mg. Este tercer producto, al igual que el de los dos grupos mencionados antes, tiene su carga social, especialmente en las canciones El baile del gamín y No hablemos mierda, en un disco de distintas tendencias que van desde la balada, pasando por el blues, algo de funk y pop-rock, y que ya no cuenta con Juan Gabriel Turbay, quien fue pieza influyente en las anteriores composiciones del grupo. Estos tres discos, reflejo fiel del rock bogotano, entran a formar parte de una historia musical que se ha caracterizado por su inconstancia discográfica, así haya un fuerte movimiento que en bares y discotecas permite a estos grupos de música juvenil interactuar con públicos crecientes que merecen un poco más de este tipo de expresiones que, finalmente, así muchos no lo crean, también hacen parte de la cultura del país.