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En París, una retrospectiva de tres expresionistas vieneses: Klimt, Kokoschka y Schiele

20 de agosto de 1984

Una gran exposición en el Hotel de Ville de París durante este verano europeo, nos ofrece una larga retrospectiva de tres de los más representativos pintores de Viena Gustav Klimt, Oskar Kokoschka y Egon Schiele. La exposición cuenta ante todo con la obra de dessins y acuarelas de 1906 a 1926, ya que la mayoría de la obra de pintura se conserva en particular en los museos de Austria y sobre todo, en el museo vienés de Belvédere.
Klimt (1862 -1918), uno de los pocos expresionistas austríacos, el mayor de los tres y, que conoció sápidamente el renombre dentro del medio artístico de Viena, influenció profundamente a los jóvenes pintores y participó en proyectos públicos, dejando una obra vibrante con cierta frivolidad, un gusto por los decorados expresivos a la manera bizantina y un gusto por lo barroco. Klimt conservó hasta el final de su vida un placer plástico por la mujer; Portrait d'une dame, Nu obése, Nu assis, Femme déshabille endormie, Femme allongée se caressant, Nu á plat ventre.
Kokoschka (1886 1980), él sólo que entra dentro del siglo acercándose a una larga vida de plástico completa y que deja una obra variada, ciertamente influenciada largamente por Klimt, pero con connotaciones mucho más violentas y donde la psicología del modelo juega un papel importante a tal punto de ser una constante interrogación para quienes estudian su pintura. Kokoschka es por su obra y su tiempo, uno de los más modernistas por su paleta y la dimensión de su color lanzado sobre la tela, más que dominado y controlado. Es un expresionista de temperamentos.
Schiele (1890 1918), sin duda alguna, el más vibrante de los tres por su descarnado trazo donde asume las variantes de la figura, dejando que desaparezca el dibujo en sí, y nos quede un movimiento plenamente original, viviente, respirando variantes y signos de modernismo en el arte contemporáneo. -
-Isaac Ortizar -