VUELTA A 40 AÑOS EN UN DIA

VUELTA A 40 AÑOS EN UN DIA
El tema de la Teletón de este año sera un homenaje al cumpleaños de la televisión, con sus ídolos, mitos y romances

LA HISTORIA DE LA televisión puede medirse con un cronómetro que dé cuenta exactamente de lo que duraba un beso de Aldemar García y Alcira Rodríguez en los años 60 y el kilométrico lapso que gastan en separarse los labios de Amparo Grisales y sus galanes en los 90, eso sí con toda clase de efectos especiales. No se trata de un simple capricho de edición, es la representación fiel del modo de sentir, vivir y amar de los millares de colombianos que desde 1954 no han dejado de sentarse en el sofá más cómodo de la casa para dejarse embrujar por los ídolos y símbolos de la pantalla chica.
Este año, cuando la televisión colombiana cumplió 40 años de accidentada existencia, nadie le había hecho un merecido homenaje, pues la programación especial de Inravisión en su momento fue muy pobre.
Pero este 25 de diciembre por fin saldrán del baúl importantes documentos que tal vez muchos guarden en el recuerdo pero que no se habían sacado a la luz pública. Desde las 8:30 de la mañana se transmitirá una edición especial con las hazañas deportivas más importantes, los dibujos animados más entrañables, las historias de amor inolvidables, los chistes más negros y más blancos, las baladas más despechadas, los héroes más aclamados, los que se fueron y los que ahora trasnochan a las quinceañeras. En varios bloques se podrá recrear esa memoria sutil que no queda registrada en los grandes titulares de la prensa, pero sí en los anales de elefante de la conciencia colectiva. Está será, pues, una oportunidad para recrear en los rizos de María Eugenia Dávila, los músculos de Pambelé, las imbatibles piernas de Lucho Herrera y las preguntas de Gloria Valencia de Castaño, el transcurso convulso de un país buscando su reflejo.
La investigación estuvo a cargo del cineasta Leopoldo Pinzón, quien se metió por meses en la cinemateca de Inravisión y en los archivos de las programadoras para arrancarle al olvido, al deterioro de los materiales y al descuido de la memoria fílmica esos testimonios de vida, de los que no se salva la historia de amor de estas cuatro décadas: la de Margarita Rosa de Francisco y Carlos Vives, los dos príncipes indestronables del reino de hojalata de la televisión, que también será relatada con pelos y señales.

UN SEÑOR ACTOR
AHORA QUE POR FIN HUMBERTO Dorado terminó su pálido papel en Sólo una mujer, vuelve en todo su esplendor, con la fuerza de sus mejores tiempos. Tendrá uno de los papeles protagónicos (el del gamonal Diego Millán) en el primer capítulo de Relatos históricos, una monumental realización de Audiovisuales con temas de la vida cotidiana del siglo XVIII. También escribió para esta producción el libreto de su tercer capítulo, en el que se mete en los vericuetos de la industria de la chichería en esa época. Además de estar escribiendo el guión de la próxima película de Sergio Cabrera (una historia de amor en el Magdalena Medio), también regresa al teatro. Lo hará en la obra Escenas de la vida conyugal, en la que, al lado de Fanny Mikey, recreará en las tablas la película del mismo nombre del cineasta sueco Ingmar Bergman. Este estreno se realizará en marzo del año entrante.

PARA VER

ASI SE HIZO

LOS MONSTRUOS están de moda en los escenarios de Hollywood. Drácula, el Hombre Lobo y, recientemente, Frankenstein han salido remozados del baúl de los recuerdos. Estos mitos de siempre se han robado la taquilla de los últimos años en superproducciones que los vuelven a la vida con efectos especiales para los ojos escépticos del siglo XX. En este especial se explican los pormenores técnicos que les dieron vida en la pantalla grande y se narran anécdotas de su filmación. Gary Oldman y Wmona Rider (Drácula), Jack Nicholson y Michelle Pfeiffer (Lobo), Robit De Niro y Helena Bonhan Carter (Frankenstein) narran sus experiencias al encarnar a estos seres de todos los tiempos y sus tórridos romances de ultratumba.


CINE A LA LATA: EL GALLO DE ORO

EN LA geografía árida del escritor mexicano Juan Rulfo, el personaje de Dionisio, arrastrando a su madre muerta sin ataúd, ocupa un lugar privilegiado. Su ascendente carrera de la mano de un gallo y de la mujer que le trae suerte se ha vuelto un estereotipo latinoamericano, con su entrega dócil a la mano del azar y los dictámenes de una sola pieza del destino, en la mejor tradición de la tragedia griega. Este cuento, que incluso fue dramatizado en Colombia con el protagonismo de Amparo Grisales y Frank Ramírez, tiene un ascendente en la filmografía mexicana. En esta versión se reunen nombres insignes de la cultura del continente: Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes adaptan su guión, la dirige Roberto Gavaldón y su fotografía está a cargo del hombre que logró las mejores imágenes de México, Gabriel Figueroa. Con esta producción se cierra el ciclo de las películas de este país que transmitió Colcultura durante el semestre que se acaba.


LA GRAN FIESTA DE LOS HOGARES COLOMBIANOS

LA TRANSMISION maratónica de las orquestas más populares del país en las fechas de Navidad y Año Nuevo se ha convertido en un plato tan típico como la natilla y los buñuelos. Así haya divergencia de gustos, este especial de Jorge Barón es ya una tradición que este año viene apoyada por nombres tan conocidos como Las chicas del Can, Rey Ruiz, Los Fantasmas del Caribe, El General, Los embajadores vallenatos, Luna Verde, Café Moreno, Diomedes Díaz, Richie Valdés, Los Alfa Ocho, El Grupo Clase, El Checo Acosta, Tulio Zuluaga, Los Tupamaros, Otto Serge, Alfredo Gutiérrez, Jorge Oñate y Orquesta Caneo, entre otros.