BORRON Y CUENTA NUEVA

HACE SEIS MESES CARLOS EL PIBE Valderrama, Freddy Rincón y Faustino Asprilla estaban en la lista negra de la mayoría de los colombianos amantes del fútbol. Ni los directivos ni el cuerpo técnico de la Selección Colombia de mayores pensaban en ellos para los próximos certámenes en que participaría el país. La idea era iniciar una nueva etapa con jugadores jóvenes, crear una nueva Selección Colombia. Algo parecido a lo que está haciendo Daniel Pasarella con la Selección de Argentina. La mayoría de colombianos estaba de acuerdo. Los aficionados pensaban que después de la desastrosa presentación de la selección en el mundial, lo único que había por hacer era un borrón y cuenta nueva.
Sin embargo, las declaraciones de Hernán Darío Gómez en relación con que estos tres jugadores podrían participar en la próxima Copa América, sorprendió a más de uno y puso nuevamente sobre el tapete el debate en torno de si los jugadores que participaron en el mundial deberían volver a vestir el uniforme nacional.
En los corrillos deportivos no se hace sino hablar de esto. Algunos no olvidan las enérgicas declaraciones de Valderrama y Asprilla, quienes afirmaron después del mundial que nunca volverían a hacer parte de la Selección Colombia. Además hay quienes piensan que si en el mundial la falla fue disciplinaria, para el equipo de Copa América no se debería convocar a nadie que haya hecho parte de esa nómina.
No obstante, el sol no se puede tapar con las manos. No hay duda de que en este momento los mejores jugadores del país son Asprilla, Rincón y Valderrama. Los dos primeros son figuras del fútbol italiano y el 'Pibe' es la estrella del rentado nacional. Lo menos que podía hacer Hernán Darío Gómez era llamarlos, pues como dijo Eduardo Arias, director de Cambio16 y quizás una de las personas que más sabe de fútbol en el país: "Si la meta del 'Bolillo' es ganar la Copa América, no lo podrá hacer sin Valderrama, Rincón y Asprilla. La selección que ha jugado hasta ahora es una que se está formando y que le falta mucho para poder obtener un título". Sin embargo se trata de un asunto de prioridades, porque si lo que se quiere es iniciar un nuevo capítulo con la búsqueda de sangre nueva, no parecería lógico recurrir a figuras ya consagradas.
El reto que tiene Hernán Darío Gómez es grande. Su principal obligación es recuperar el prestigio del fútbol colombiano y borrar la imagen de indisciplina y falta de humildad que mostró en USA 94. En cuanto a cómo hacerlo, él tiene la última palabra como responsable del equipo. Es de presumir que si decide traer a los veteranos es porque está razonablemente convencido de que las heridas están sanadas y, sobre todo, de que el fantasma del desinterés y la falta de entrega por la camiseta nacional ha quedado atrás. -