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| Foto: AFP

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El divorcio entre Andy Murray y Amelie Mauresmo

El tenista escocés sorprendió al mundo tenístico al anunciar que la exnúmero uno de la WTA deja de ser su entrenadora. El tema se volvió controversial.

10 de mayo de 2016

Andy Murray, número tres del mundo, ha asegurado que no descarta contratar a un exjugador como preparador tras la "separación de mutuo acuerdo" con Amelie Mauresmo.

Murray, finalista el pasado domingo en el Masters 1.000 de Madrid, anunció el lunes que había puesto fin al vínculo profesional con la preparadora francesa después de casi dos años trabajando juntos.

Anteriormente a Mauresmo, Murray, de 28 años, primer jugador profesional que escogió a una mujer para el banquillo, fue entrenado por Ivan Lendl, y bajo sus órdenes ganó un Abierto de Estados Unidos, un título en Wimbledon y el oro olímpico en los Juegos de Londres 2012.

"No tiene por qué serlo, pero sí es muy posible que sea un antiguo tenista", dijo el escocés a la cadena británica BBC Sport. "Preparadores que han jugado al máximo nivel pueden ayudar en los Grand Slam y en los partidos importantes", añadió.

Murray, que está en Roma participando en el Masters 1.000 de la capital italiana, mostró sus dudas cuando le preguntaron si encontraría un nuevo técnico antes de que comience el torneo de Roland Garros, el próximo 22 de mayo.

"No creo que pueda tener a nadie para París. De hecho, diría que es muy improbable", aseguró el escocés.

"Hay una semana libre después de Roland Garros y antes de Queen‘s, así que ahí podría probar algo. No voy a empezar a trabajar a tiempo completo con un entrenador sin haberlo probado antes", sostuvo Murray.

"He hecho lo mismo con todos mis técnicos. Se necesita un poco de tiempo sobre la pista juntos para ver cómo irá la práctica y cómo será la comunicación", agregó.

El tenista de Dunblane agradeció a Mauresmo por su trabajo y dijo que le hubiera "encantado ganar un (torneo de) Grand Slam" bajo las órdenes de la preparadora francesa.

"Aunque no gané un ‘grande‘ con ella, llegué hasta el número dos del mundo. No fue perfecto, y nos hubiera encantado conseguir un (torneo de) Grand Slam, pero pasamos momentos muy buenos", apuntó Murray.