EL GALLO TAPADO

DESDE ESTA semana los amantes del buen tenis en Colombia están saltando de felicidad. Y no es para menos, ya que por estos días los aficionados al deporte blanco están disfrutando en Bogotá de los espectaculares saques, voleas y reveses de más de 20 jugadores de primer nivel de la Asociación de Tenistas Profesionales. La mayoría están ubicados dentro de los 100 primeros del ranking de la ATP y cinco de ellos han estado en el top ten de la Asociación -Aaron Krickstein, Alberto Berasategui, Emilio Sánchez-Vicario, Richard Krajicek y Andrei Chesnokov-.
Algunos de los participantes son familiares para el público. como Alex Corretja, Javier Frana, Marcelo Ríos y, obviamente, quien por estos días ha despertado los más elogiosos comentarios en Colombia: Mauricio Hadad. Pero dentro de este grupo de jugadores hay algunos de los que poco se ha escuchado en el país a pesar de estar sonando en el exterior, como es el caso del estadounidense Vince Spadea.
Su nombre tal vez no le diga mucho al espectador desprevenido, quien posiblemente no sabe que actualmente ocupa el puesto número 74 del escalafón, mide 1,83 metros y tiene 20 años. Los más enterados conocen que es hijo de una colombiana. Pero para la crítica especializada de Estados Unidos, Spadea será en muy poco tiempo el próximo número uno. aunque algunos dicen que esa es una afirmación demasiado exagerada por parte de los cautelosos críticos estadounidenses. Pero la verdad es que analizando la carrera de Vince se deduce que este es un hombre al que de ahora en adelante hay que seguirle los pasos.
En 1992 fue el segundo estadounidense, después de Jim Courrier en el 87, en ganar el Orange Bowl Rolex. A pesar de que en esa temporada terminó en el cuarto lugar del escalafón mundial en la categoría juvenil, fueron sus actuaciones del año pasado las que hicieron que los especialistas le pusieran los ojos encima.
En 1994 se convirtió en el primer norteamericano en ganar tres torneos Challenger en un sólo año. Al finalizar la temporada su ranking subió del número 303 al 80, convirtiéndose en el más joven en los top 100 de la ATP.
En esa misma época fue nominado al novato del año. Quienes lo han seguido de cerca dicen que no sólo es uno de los jugadores más jóvenes y rápidos, sino que también posee uno de los mejores reveses a dos manos del mundo. Si se tiene en cuenta, además, que de los 18 estadounidenses que están escalafonados dentro de los top 100 de la ATP, solamente Agassi, Sampras, Chang y Courrier lo hicieron a temprana edad, y que Spadea no tiene un entrenador de tiempo completo, se entiende por qué están pensando desde ya en él como un futuro sucesor de Agassi.
Sin duda alguna este esfuerzo por parte de la empresa privada -en este caso Bavaria- al organizar el World Series de tenis en el país, es una oportunidad inigualable para observar no sólo un torneo de un elevado nivel, sino a figuras que como Spadea van camino a la consagración pasando por Colombia.