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El dueño del Mónaco nació en Perm, Rusia, hace 46 años. Estudió medicina y luego empezó su ascenso económico. | Foto: Cortesía Bloomberg.

FÚTBOL

El magnate ruso que compró a Falcao

El millonario Dmitry Rybolovlev cumplió su sueño de juntar de nuevo a James Rodríguez con el goleador samario.

27 de mayo de 2013

Es como un niño con un álbum nuevo. “¿Cuántas láminas me faltan?”, “¿este todavía no lo tengo?” Son algunas de las preguntas que probablemente se hará el millonario ruso Dmitry Rybolovlev, el dueño del Mónaco, el equipo que tiene al rojo vivo el mercado de pases del fútbol europeo.

Su problema no es de plata. Para nada. ¿Qué Falcao vale 60 millones de euros en efectivo? Listo. ¿Qué hay que pagarle 10 millones al Barcelona para que libere al portero Víctor Valdés? No hay problema. ¿Qué hay que soltar otros 45 millones para que el Porto deje ir al centrocampista James Rodríguez? De una.

El ultramillonario Dmitry Rybolovlev no se pone con medias tintas. Los hinchas del Mónaco, su nuevo juguete, están encantados con él. Saben que es la persona ideal para llevar el club del principado a los primeros lugares de Europa. Y como en el futbol moderno todo se hace con mucho talento y, sobre todo, con mucho dinero.

Ya contrató a James Rodríguez y João Moutinho, por quienes pagó una astronómica cifra al Porto de Portugal. Y además se habla de querer llevarse a Dani Alves, entre muchas otras figuras del fútbol internacional.

El magnate ruso adquirió dos tercios del club con la promesa de invertir una millonaria cifra en contrataciones y devolver al equipo rojiblanco a los primeros lugares. Y a fe que lo está cumpliendo.

El primer paso fue el retorno a la Ligue 1, tras siete años en segunda división. Una vez ascendido, el club emprendió la compra de jugadores para conformar una nómina de lujo que ya integran, según las últimas informaciones, la dupla sensación de la Selección Colombia: James Rodríguez-Radamel Falcao García.

Pero, ¿quién es Rybolovlev? El dueño del Mónaco nació en Perm, Rusia, hace 46 años. Estudió medicina y luego empezó su ascenso económico, que coincidió con el desplome del bloque socialista y la desintegración de la Unión Soviética.

Rybolovlev fue director y accionista de una planta química, y luego hizo inversiones en diferentes empresas, en especial una productora de fertilizantes llamada Uralkali, y en el sector bancario. Su capital creció entonces hasta convertirse en uno de los hombres más ricos del mundo, según la revista Forbes.

En los últimos años se dedicó a invertir en lujosas propiedades inmobiliarias, como Central Park, en Nueva York, Hawaii y las islas griegas. En el 2011 su derrochador camino llegó a Mónaco, donde compró un costoso apartamento donde ahora vive.

En ese momento el equipo del principado estaba en una crisis deportiva (ocupaba la cola de la segunda división) y Rybolovlev decidió seguir el camino de otros millonarios que incursionaron en el fútbol.

Adquirió el 66% del club y prometió devolverle el prestigio. Contrató al entrenador italiano Claudio Ranieri e invirtió 20 millones de euros en refuerzos. Ahora quiere armar una nómina de lujo, en la que pretende tener al atacante argentino Carlos Tévez, ‘El Apache’, para que él y Falcao le aseguren muchos goles.

Pero el Mónaco no la tiene fácil. Deberá competir con el Paris Saint Germain, del jeque árabe Nasser al-Khelaifi y que ya lleva dos temporadas con millonarias inversiones. Y en Europa con otros “nuevos ricos” como el Málaga español y el Manchester City inglés que ya llevan varios años con ese modelo.