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Independiente Santa Fe, campeón 2016 | Foto: Carlos Julio Martínez

FÚTBOL

Independiente Santa Fe alcanzó su novena estrella

El equipo cardenal se consagró ante su público y después de vencer 1 a 0 a Deportes Tolima levantó el título del fútbol colombiano.

19 de diciembre de 2016

Hay una frase muy popular en el fútbol: “las finales no se juegan, se ganan” y así lo hizo Independiente Santa fe, que con gol de Héctor Urrego se impuso por 1 a 0 frente al Tolima y se proclamó campeón del torneo clausura 2016 del fútbol profesional colombiano.

Ambos equipos plantearon el partido como se había proyectado en la previa. ‘Los Cardenales’  presionando sin dar espacios a su rival y esperando un contragolpe o pelota quieta con la que pudieran desequilibrar el compromiso. ‘Los Pijaos’, por su parte, buscaron hacer daño a través de la posesión del balón y jugando en el campo rival.

La fórmula correcta fue la planteada por Gustavo Costas. En el minuto 11, con un tiro libre ejecutado por Jonathan Gómez, Héctor Urrego superó a Danobis Banguero y cabeceó de forma certera, sin darle ninguna oportunidad a Joel Silva para evitar la anotación. 

Esta no es la primera vez que el conjunto capitalino marca diferencia con la pelota quieta, ‘los leones’ se han caracterizado por hacer un excelente trabajo en esta clase de jugadas y ya son varios los campeonatos en los que han podido celebrar por acciones de balón parado.

Esta anotación le dio confianza a los capitalinos, quienes jugaron con más confianza y atacaron  con transiciones rápidas.

A pesar de que el equipo de Alberto Gamero tuvo la mayor posesión de balón no pudo encontrar espacios para explotar y sus mejores chances de empatar fueron a través de tiros de media distancia.

El momento que dio más ilusión a los hinchas tolimenses fue en el minuto 71, cuando hubo cuatro tiros de esquina consecutivos en los que Leandro Castellanos respondió cuando fue exigido con varios cabezazos por parte del equipo visitante.

Después de esto el desespero se apoderó de los jugadores del ‘vinotinto y oro’, que demostraron su frustración con fuertes faltas que resultaron en cinco tarjetas amarillas y una roja, que fue el golpe de gracia para este equipo, que buscaba el segundo laurel de su historia.

Este fue la novena estrella para los cardenales que ya habían logrado ser los mejores de Colombia en los campeonatos de: 1948, 1958, 1960, 1966, 1971, 1975, 2012-I, 2014-II y 2016-2 respectivamente.

Este es el segundo título que Gustavo Costas alcanza al mando del club cardenal, con el que ya había dado la vuelta olímpica en el 2014.