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LOS FUGADOS

En diferentes partes del mundo, una docena de entrenadores colombianos son reconocidos entre los mejores formadores de tenistas profesionales.

16 de octubre de 1995

TODO EN LA VIda tiene sus compensaciones y el tenis no es la excepción. Para nadie es un secreto que actualmente en el panorama internacional Colombia tan sólo tiene una figura importante en la ATP, el caleño Mauricio Hadad. Sin embargo, la escasa representación de jugadores nacionales de primer nivel dentro del ranking internacional está muy bien compensada con el inmenso prestigio que cerca de una docena de colombianos han logrado como preparadores de destacadas figuras del deporte blanco.
El de mayor reputación, sin duda alguna, es William 'El Pato' Alvarez (ver artículo anterior). Pero junto a él se encuentran nombres que la mayoría de los colombianos nunca han escuchado mencionar, o simplemente no recuerdan, a pesar de que hicieron historia como tenistas.
Casi todos tuvieron que salir del país en busca de horizontes más amplios. Ese fue el caso de Jairo Velasco, aquel gran jugador de los años 70, quien llegó a figurar dentro de los 40 mejores tenistas de la ATP. Hasta hace poco tiempo fue el entrenador que, según los expertos, más influyó en el desarrollo tenístico de Conchita Martínez. Aunque en la actualidad no es su instructor permanente, continúa asesorando a la española en algunos torneos.
Otro de los destacados es Iván Molina, el jugador nacional que mejor ubicación ha logrado en la ATP. Llegó a ser el número 22 del escalafón en 1975 y desde enero de 1993 trabaja con la Federación Internacional de Tenis preparando jóvenes entre 18 y 20 años para que hagan parte de los 100 mejores del mundo. Varios de sus pupilos ya figuran en la selecta lista, y tanto dentro de la Federación como en la Asociación su trabajo es uno de los más resaltados.
El pereirano Alvaro Betancur, quien estuvo entre los 100 mejores de la ATP a comienzos de los años 70, es actualmente el entrenador del principal tenista japonés, Hido Mitsuoca. A mediados de los 80 fue el más importante preparador de la escuela Harry Hoffman, una de las de mayor reconocimiento en Estados Unidos.
Aquellos que no lograron destacarse internacionalmente dentro de las canchas son hoy en día afamados preparadores a nivel mundial; tal es el caso de los hermanos Carlos, René y Raúl Gómez -este último es el actual entrenador de Hadad-. Ellos son ampliamente respetados en el medio tenístico estadounidense por su labor en la famosa academia dc Nick Bolletieri, en la cual fueron instructores.
La lista de entrenadores fugados difícilmente puede resumirse en pocas líneas, porque los méritos de todos ellos sobrepasan lo que las palabras pueden expresar. Pero la verdad es que a Colombia la conocen más en el ambiente tenístico internacional por lo que sus instructores hacen desde afuera de las canchas que por lo que sus tenistas hacen dentro de ellas.