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CALI, MODELO PARA ARMAR

Por una vez, autoridades estadounidenses adoptan modelos colombianos de desarrollo económico y social.

2 de mayo de 1994

POCAS VECES HABIA SUCEdido algo así. Una conferencia en la Universidad de Columbia en Nueva York, sobre los esquemas de desarrollo económico y social aplicados por algunas organizaciones caleñas, dejó más lecciones a los estadounidenses que a los colombianos. La conferencia, presentada por la Escuela de Administración Pública de la Universidad de Columbia y el Instituto Lehrman, y coordinada en Colombia por Francisco José Lloreda, fue todo un éxito. Hoy por hoy los académicos de Columbia presentan el ejemplo caleño como un modelo que debe reproducirse en otras partes del mundo.
El caso caleño es atípico. Una de sus más importantes industrias cede el 40 por ciento de sus ganancias a una fundación dedicada al trabajo social; un gran empresario pasa su tiempo atendiendo a gentes de la tercera edad; una institución financiera invierte la totalidad de sus utilidades en programas sociales; el servicio de atención médica primaria es realizado puerta a puerta por voluntarios especialmente entrenados por la Secretaría de Salud. Resultado: la resurrección de sectores olvidados, como el Distrito de Aguablanca; la rehabilitación del barrio El Diamante, un servicio de recolección de basuras que mantiene la ciudad limpia y que intercambia desechos por adoquines para pavimentar kilómetros de calles; una tasa de mortalidad infantil inferior a la de NuevaYork, y un sistema de potabilización de agua económico construido y manejado por la misma comunidad.
Son precisamente estas particularidades las que hace más de un año impulsaron a Lloreda a buscar en Estados Unidos y en Colombia la financiación para hacer un estudio de caso sobre diez de las fundaciones que han hecho de Cali un modelo de progreso difno de reproducir. "Hemos estado dos dias aprendiendo las lecciones de Cali -comentó al final de la conferencia Steven Cohen, director del magíster en Administración Pública de la Escuela de Asuntos Públicos de la Universidad de Columbia-. Ha sido un modelo único por la manera como líderes de negocios, cívicos, políticos y las comunidades académicas han podido trabajar para desarrollar programas de salud, de infraestructura, económicos y educativos". Y. lo cierto es que, siguiendo la premisa de que en una sociedad enferma no puede haber una empresa sana, los distintos sectores del Valle han llegado a un esquema de trabajo social que merece la pena de ser analizado.
Dos meses de trabajo de campo de estudiantes de las universidades del Valle y de Columbia establecieron cuáles eran los factores de éxito del trabajo de las entidades, y cuál era su probabilidad de repetirlos en otros lugares. Y las conclusiones, que serán publicadas en un libro llamado Cali, espíritu emprendedor, van tan lejos como las aplicaciones prácticas de lo aprendido en los auditorios de la Universidad de Columbia. No sólo ya en Boston el servicio de salud primaria (llamado Cali's) ha adoptado el esquema caleño, sino que, además, la universidad neoyorquina ha decidido copiar el modelo de su homóloga del Valle en trabajo en la comunidad. Próximamente- con base en el modelo de trabajo de la Universidad del Valle- Columbia comenzará a desarrollar esquemas de trabajo social en Harlem, una de las zonas más pobres de Manhattan.
Adicionalmente, las autoridades neoyorquinas han tenido lazos con las instituciones que fueron objeto de estudio, para reproducir y adaptar modelos de trabajo social similares a los de Cali. Se ha establecido un vínculo permanente entre los departamentos de administración pública de las dos universidades para implementar un magíster en la Universidad del Valle, e intercambiar materiales y profesores. Además, la firma estadounidense de consultoría Sawyer & Miller -que durante los dos últimos gobiernos ha asesorado a Colombia en imagen- quiere repetir la conferencia en varios lugares del mundo.