Los proveedores de servicios se han encargado de “confundir a sus clientes” haciéndoles creer que los datos almacenados en la nube literalmente están en el aire. | Foto: Bloomberg

Tecnología

¿En dónde va a parar la información que se almacena en la nube?

La computación en la nube o ‘cloud’ se ha convertido en uno de los mecanismos más efectivos para almacenar la gran cantidad de datos de las empresas y Gobiernos de todo el mundo. Sin embargo, muchos directivos aún desconfían de ese sistema tecnológico por considerar que no tienen un control real sobre su información.

9 de septiembre de 2015

Dinero remitió las principales preocupaciones de los empresarios al ingeniero eléctrico Dairo Ortiz, vocero de la multinacional especializada en telecomunicaciones BT. El experto aseguró que los proveedores de servicios se han encargado de “confundir a sus clientes” haciéndoles creer que los datos almacenados en la nube literalmente están en el aire.

Ortiz explicó que la información se almacena en los centros de procesamiento de datos (CPD) que hay en todo el mundo. En esas instalaciones físicas, administradas por los proveedores de los servicios en la nube, reposan los archivos digitales de las compañías, que a su vez deben pagar un porcentaje por “arrendar” este espacio. 
 
El ingeniero simplificó la definición del concepto al afirmar que la computación en la nube “es una tecnología que añade una capa más a los servicios de virtualización tradicionales”, y agregó que esta herramienta ha contribuido a potencializar los negocios de las empresas.

Un  buen manejo de la información conlleva a que “las compañías sean más eficientes” y a que los Gobiernos alcancen un mayor grado de “transparencia” en su gestión, argumentó Ortiz, quien participó  en la más reciente versión del Congreso Internacional Andicom.

Las ventajas que ofrece el ‘cloud’, según el directivo, son incalculables y se traducen en un ahorro significativo para las finanzas de las empresas. Gracias a esa herramienta ya no es necesario invertir grandes cantidades de dinero en infraestructura de almacenamiento de datos que “tiene que ser reemplazada al cabo de cinco años”, apuntó.

El director de mercadeo de Ericsson para América Latina y el Caribe, Jesper Rhode, dijo que la nube es una herramienta que está revolucionando el mercado pues es la única que garantiza que los grandes volúmenes de información “no se pierdan”.

“Los servicios en la nube no solamente le importan a los directores de informática al interior de las empresas, también involucran al sector de ventas, logística y producción”, concluyó el vocero de la firma sueca.

¿Los empresarios están en la nube?

El 57% de las organizaciones a nivel mundial ya utilizan la nube o planean implementarla, sin embargo, solo el 25% de ellas ha logrado alcanzar cierta madurez en el desarrollo de ese campo, señala un informe publicado por International Data Corporation (IDC) junto con Cisco.

La investigación, que se realizó a partir de las encuestas aplicadas en 17 países y 3.463 organizaciones, señala que el 53% de las empresas esperan que la computación en la nube les ayude a incrementar sus ingresos durante los próximos dos años.

Con respecto a los sectores que esperan mayores beneficios destacan a “los servicios profesionales, la tecnología y el transporte, las comunicaciones y los servicios públicos (TCU)”, agrega el estudio.

Poca credibilidad

A pesar de la aceptación que ha tenido ese tipo de tecnología, también hay cifras que demuestran el alto grado de escepticismo que existe alrededor de los beneficios reales de esa solución.  

Por ejemplo, el 54% de los encuestados opinó que la computación en la nube no generará una mayor agilidad en las operaciones de sus entidades, mientras que el 51% no cree que con esa herramienta se mejore la experiencia del cliente.

Varios de los ejecutivos aún desconocen que gestionar los datos en la nube de manera optimizada les permitiría “incrementar los ingresos un 10,4%, reducir los costes un 77%, acelerar la provisión de servicios y aplicaciones un 99% y duplicar la capacidad de invertir en nuevos proyectos para impulsar la innovación”, finaliza el informe.