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Cuando el río suena...

Hill y Knowlton Strategies, empresa internacional en el área de consultoría en comunicación, estrena presidente y director general en Colombia.

9 de agosto de 2014

*Estratega de comunicaciones: Hill y Knowlton Strategies, empresa internacional en el área de consultoría en comunicación, estrena presidente y director general en Colombia. Se trata de Alfonso Cuéllar, quién viene de ser el segundo a bordo en la Embajada de Colombia en Washington. Cuéllar tiene una amplia experiencia en el medio, ha sido editor jefe de la revista Semana, editor internacional de El Tiempo y gerente de asuntos de gobierno y públicos de BP en Bogotá. Hill y Knowlton Strategies tiene su sede en Nueva York y cuenta con 90 oficinas en 52 países, así como una extensa red de asociados. La agencia es parte de WPP, el grupo más grande del mundo en servicios de comunicación.

*Informe cafetero:
El documento final de la comisión de expertos que estudia el futuro de la caficultura colombiana solo se conocerá cuando siete de los nueve miembros voten afirmativamente las propuestas en su conjunto. En este momento, los expertos están revisando la última versión del informe, antes de someterlo a la votación definitiva. Si las propuestas no son acogidas por siete miembros, se abrirá nuevamente la discusión de los temas. Este documento se le presentará al presidente Santos quien tendrá la última palabra sobre los planteamientos que se hagan. En todo caso, una de las bases del estudio es defender a los pequeños productores y hacer que esta industria sea sostenible en el largo plazo.

*Plan de desarrollo:
El Plan de Desarrollo del gobierno Santos para el periodo 2014-2018 tendrá tres grandes ejes: educación, prosperidad rural, innovación y paz. Tendrá varios temas transversales que permitan poner en prácticas los programas propuestos en la campaña. Todavía no han definido el nombre que llevará. Cabe recordar que el plan del primer mandato de Santos se llamó ‘Prosperidad para Todos’. Esta que es considerada la carta de navegación de todo gobierno, debe someterse al mismo trámite de una ley de la República en el Congreso, aunque en un término abreviado de tres meses.