El banquero más poderoso del país, Luis Carlos Sarmiento Angulo, sorprendió el pasado jueves durante la celebración de los 35 años de Anif por sus duras críticas a la situación económica. Sarmiento ha sido uno de los empresarios más elogiosos de las políticas del presidente Álvaro Uribe. Sin embargo, en esta ocasión si bien destacó las bondades de la Seguridad Democrática y ratificó que apoya un tercer mandato de Uribe, cuestionó muchas cosas. Por ejemplo los alivios tributarios. Dijo que a pesar de ellos la inversión ha venido cayendo. “La inversión productiva lo que requiere son reglas claras y estables, no exenciones tributarias discrecionales para unos pocos”. Criticó el impuesto bancario y dijo que el del patrimonio, de prolongarse, desestimulará la inversión. Agregó que el país sufre un atraso serio en el cronograma de la infraestructura. Para Sarmiento, hoy es claro que la economía no estaba blindada y que el crecimiento del PIB se ha estancado. “El desempleo amenaza con repuntar a tasas del 13 por ciento lo que producirá un grave lastre social”. De haber reducido más rápidamente el desempleo, la caída en la pobreza absoluta hubiera sido más satisfactoria. Y concluyó diciendo que el próximo gobierno tendrá un gran reto económico para volver a crecer a tasas del 6 por ciento.