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EL PODER DE LA INFORMACION

Se acaba de crear una compañía para darle acceso a los empresarios colombianos al más grande supermercado de información del mundo.

16 de enero de 1995

EL MUNDO DE LA CIBERNEtica ha venido cambiando cada vez más la manera de vivir de la humanidad. Pero definitivamente las autopistas de la información van a hacer tan diferente la vida que ya hay toda una serie de conceptos, como los de las oficinas y las ciudades, que quedarían revaluados. Estos sistemas, de los cuales el Internet es el más conocido, permiten que la gente trabaje desde cualquier lugar mientras esté conectado a las redes de computadores.
Colombia accedió al sistema Internet hace unos pocos meses. Aprovechando esta circunstancia, se estableció en el país Trade Link, -una empresa promovida y gerenciada por el ejecutivo barranquillero Rodolfo Moseres- que se encuentra dedicada a la desafiante tarea de venderle información y aplicaciones prácticas al mundo empresarial. Trade Link es la representante en Colombia de Dialog, que es el sistema en línea más grande y complejo del mundo. Es una especie de supermercado donde se tiene acceso a 450 bases de datos a nivel mundial.
Dialog surgió hace 20 años como una división de la Lookheed Corporation, que la fundó para recopilar toda la información tecnológica relacionada con la industria de la defensa y el armamento. Esa idea fue ampliándose y evolucionando hasta llegar al concepto universal que tiene en la actualidad. Hoy en día es parte del Grupo editorial Knight-Ridder, uno de los más importantes de Estados Unidos.
Para acceder al sistema Dialog sólo se necesitan un computador, un modem y una línea telefónica. Una vez conectada, la persona puede revisar miles de documentos en cuestión de segundos. La gama es ilimitada y para todos los gustos. Directorios de compañías y listas de productos. Información financiera, económica y científica. Revistas y boletines especializados y periódicos locales e internacionales. Biografías históricas e información sobre patentes, marcas y derechos de autor. En un solo lugar se pueden encontrar los textos completos de artículos de más de 2.500 revistas, referencias y resúmenes de más de 100.000 publicaciones internacionales, perfiles financieros de más de 12 millones de compañías, detalles de más de 15 millones de patentes y datos sobre más de 10 millones de sustancias químicas.
El sistema le permite a un industrial la posibilidad de investigar cualquier compañía o producto, conocer la legislación mundial y local que afecta el comercio internacional de sus productos, proteger sus inversiones en propiedad intelectual, monitorear la competencia, realizar investigación de mercados y estar informado sobre los últimos avances tecnológicos. Dialog es diferente, sin embargo, de otros servicios ampliamente utilizados en Estados Unidos, como los de Compuserve, Prodigy y American Line, cuyo enfoque está dirigido a un mercado más popular, que incluye posibilidades como la de las compras por catálogo.
El cambio en la utilización y el acceso a servicios como el de Dialog ha sido dramático ya que se ha vuelto muy asequible y sencillo de usar. Hay que estar suscrito para tener acceso y el costo de las consultas para los suscriptores varía desde cinco a 100 dólares, según el grado de complejidad. El valor de las comunicaciones también se redujo gracias a la apertura en servicios de valor agregado de telecomunicaciones, como los de Coldapaq, Sprint, Impsat y Colomsat, que permitieron bajar los costos de conectarse con el mundo vía Internet de un dólar con 50 centavos por minuto -el valor de una llamada de larga distancia- a 19 centavos de dólar por minuto. Esto representa cerca de 150, pesos, que es más barato que una llamada de Bogotá a Barranquilla.
No obstante, uno de los principales retos de Trade Link va a ser el de convencer a los colombianos de que la información es un producto por el que hay que pagar. El sistema ya cuenta con importantes clientes, como Ecopetrol, Monómeros Colombo Venezolanos, Proexport y algunas multinacionales. Pero en el camino están todavía por convencer a las empresas medianas y a los pequeños usuarios, que son los que generan el volumen.