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Las banderas de la Unión Europea y de Grecia en la sede del banco central heleno, luego del estallido de un carrobomba que no dejó víctimas este jueves. | Foto: AP

CRISIS

Grecia seduce en su regreso al mercado de valores

El país, aún en medio de la crisis, logró recaudar 3.000 millones de euros, la mayoría de inversionistas extranjeros.

10 de abril de 2014

La primera emisión de deuda griega en cuatro años tuvo este jueves más éxito del esperado por Atenas entre los inversores extranjeros, en una jornada ensombrecida, sin embargo, por un atentado sin víctimas contra el Banco central.

"Los mercados internacionales han expresado una confianza incuestionable en la economía griega, y en su capacidad para salir de la crisis", se congratuló el primer ministro Antonis Samaras, en un mensaje televisado.

"Políticamente, el éxito es mayor de lo previsto", se felicitó a su vez el viceprimer ministro Evangelos Venizelos, exhibiendo la satisfacción de todo un país al que los más pesimistas auguraban hace dos años una salida del euro.

Por su parte, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, aseguró en Washington que el éxito de esta operación demuestra que "Grecia marcha en la dirección correcta".

El ministerio de Finanzas había anunciado a las 11:00 GMT el resultado de la operación, preparada desde hace meses y lanzada tres horas antes: Grecia consiguió captar 3.000 millones de euros en obligaciones a cinco años a una tasa de interés del 4,75 %, excelente para un país aún calificado entre los valores especulativos.

"La demanda ha sido muy fuerte y la emisión fue suscrita en un 90% por inversores extranjeros", anunció el ministerio en un comunicado. "Los mercados han votado por Grecia", interpretó Venizelos, quien informó de que la demanda "fue al menos ocho veces" mayor que la oferta.

La jornada se había iniciado, sin embargo, con la explosión de una coche bomba cerca del Banco central de Grecia, en pleno centro de Atenas, que no dejó víctimas, pero sí ensombreció una jornada que sería altamente simbólica.

"El retorno de Grecia (a los mercados de la deuda) es una noticia muy alentadora para Grecia y para Europa", se felicitó la Comisión Europea, tal como hiciera la víspera el FMI. A ojos de Bruselas y de la institución multilateral, ello valida la estrategia aplicada para salvar a Grecia de la quiebra en 2010.

La última emisión griega a cinco años databa de febrero de 2010, con un tipo de interés al 6,1%. Desde entonces, el país sólo emitía bonos a corto plazo y por montos exiguos.

Grecia fue la primera víctima de la crisis de la deuda en la zona euro, a finales de 2009. Al no poderse financiar ante los acreedores privados, tuvo que recurrir a rescates internacionales de la Unión Europea (UE), el Banco Central Europeo (BCE) y el FMI, que sumaron unos 240.000 millones de euros. Ello le permitió evitar la quiebra, que habría amenazado la existencia misma del euro. 

"Lentos progresos"

El éxito de esta emisión "refleja el regreso de la confianza de los inversores en las perspectivas de la economía", estima Platon Monokroussos, economista jefe de Eurobank.

Los analistas extranjeros eludían, en cambio, cualquier triunfalismo. Ishaq Siddiqi, de ETX Capital, destacó que este éxito tiene mucho más que ver con la mejoría de la situación en zona euro que con los "lentos progresos" de la economía griega. "En un sentido, se puede decir que los inversores compran obligaciones griegas garantizadas por Alemania y el BCE", aseguró.

Más crítico aún, Christopher Dembik, de Saxo Banque, recuerda que incluso "Sri Lanka logró recientemente hacer una emisión a cinco años con un rendimiento del 5%".

Son, en efecto, varias las inquietudes que persisten sobre la situación griega: su colosal deuda pública (175% del PIB), un desempleo del 26,7% en enero y un débil potencial de crecimiento en 2014, tras seis años de recesión.

De la misma manera que la solidez económica, la estabilidad política es un parámetro esencial para los inversores. Y aquí también la situación es compleja.

La mayoría de la coalición conservadores-socialistas, en el poder, está en serias dificultades frente a los partidos de oposición, en particular Syriza (izquierda radical), hostil a los planes de reactivación económica del país.

Finalmente, esta intensa semana en Grecia terminará el viernes, con la visita a Atenas de la canciller alemana, Angela Merkel, que sin duda será portadora de mensajes positivos.