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Las dolorosas imágenes de los familiares de las víctimas de la masacre en Samaniego (Nariño). | Foto: AFP

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El dolor de familiares de las víctimas en masacre de Samaniego

El primer testimonio, tras el repudiable acto en el que murieron 8 jóvenes en Nariño. En la tarde de este lunes será el sepelio de los jóvenes, mientras está prevista una reunión de derechos humanos en el pueblo.

17 de agosto de 2020

El dolor saltó rápidamente de los cañaduzales del Valle del Cauca al poblado de Samaniego, en Nariño. La masacre en la vereda Santa Catalina, jurisdicción del municipio nariñense, fue la segunda en el sur del país en menos de una semana.

Exclusivo: así departían los jóvenes de Samaniego minutos antes de la masacre

Lo que inició como un festejo de jóvenes en la zona rural de Samaniego, en donde solo se escuchaban risas, música y jóvenes que se tomaban una que otra cerveza, terminó en horror para las familias de las víctimas que no logran entender lo sucedido. De hecho, el país entero está desconcertado.

Así como Álvaro Caicedo, padre de uno de los jóvenes asesinados en Cali, dijo en medios radiales que solo se trataba de niños que querían divertirse y no de delincuentes, los familiares de las víctimas en Samaniego también mostraron su desazón.

En la tarde del lunes festivo, 17 de agosto, enterrarán a sus muchachos, todos menores de 26 años y llenos de sueños y ganas de vivir.

Por eso, a Miguel López, pariente de Óscar Andrés Obando Betancourt, el menor de todos entre las 8 víctimas de Samaniego, se le quebró la voz al decir en SEMANA que “nada justifica que los hayan matado”.

Su rabia se cuela entre el llanto, al mencionar las palabras de los que han hablado de una fiesta en la que los jóvenes no tenían las medidas de bioseguridad establecidas por la pandemia.

A los padres de Óscar solo les queda una hija

Óscar Andrés era primo de Miguel, pero en los pueblos los primos son como hermanos. Por eso quizá conoce los detalles de los sucesos trágicos que hoy no solo enlutan a Nariño, donde estará una comisión de derechos humanos reunida a partir de la 1 de la tarde. Su cercanía con el hecho también se debe a que la casa en la que ocurrió la masacre estaba siendo habitada por una de sus tías, Socorro, luego del fallecimiento hace 20 días de la mamá de Gladys, progenitora de Óscar.

El dolor que hoy siente la madre del joven asesinando en la masacre, según cuenta Miguel, es un golpe que se suma, con implacable crudeza, a las tres pérdidas que ha tenido la mujer en menos de dos años. Óscar era el segundo de sus tres hijos. La mayor, Yuli Eliana, es la única que le queda. El más pequeño, José Miguel, falleció hace año y medio en un accidente.

Con Óscar Andrés, los padres estaban llenos de sueños. Cursaba cuarto semestre de deportes en la Escuela Nacional del Deporte de Cali. Su retorno a Samaniego se dio por la pandemia, pero seguía recibiendo sus clases universitarias de manera virtual. En la capital del Valle estaba su novia, con la que llevaba una hermosa relación.

Todos eran muchachos muy sanos. Aquí no cabe ninguna suspicacia”, relata Miguel, quien recuerda que la única mujer en el grupo de los jóvenes asesinados, Michel, cursaba medicina en Pasto.

De cada una de las familias que hoy lloran a sus jóvenes, Miguel fue describiendo sus actividades loables. Agrega en su relato que Samaniego siempre ha sido un pueblo de gente trabajadora y reitera que los muchachos departían alrededor de un asado para celebrar el cumpleaños de uno de ellos y rememorar el evento musical que se celebraba en el pueblo antes de la llegada de la pandemia.

Por eso no tuvieron ninguna malicia cuando llegaron las motos con los hombres armados que abrieron fuego. En su testimonio, Miguel López dice con tristeza que, en su familia, se apagó la alegría. Gladys, la madre de Óscar, es enfermera y trabaja en un laboratorio clínico. El padre del joven es pensionado del departamento. La pareja estaba siempre pendiente de su hijo, de su salida y su llegada de la universidad. “Intentamos apoyar a mi tía Gladys en este momento. Aunque sabemos que nada podrá llenar la ausencia de su amado hijo”.

Tarde de miedo en Samaniego

En Samaniego no solo hay miedo. También hay expectativa porque les han anunciado la visita de la vicefiscal Martha Janeth Mancera. Además, en la tarde de este lunes festivo se realizará una reunión de derechos humanos.

Sobe los hechos ocurridos, la Organización de Naciones Unidas y la Misión de Verificación de esa organización en Colombia emitieron un comunicado en el que condenan la masacre de los 8 jóvenes.

La ONU manifiesta una honda preocupación por la continuidad de homicidios de defensores de derechos humanos y líderes sociales. Rememoran que, en lo corrido del año, la oficina de la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos ha documentado 33 masacres y viene dando seguimiento a 97 asesinatos de defensores humanos. El organismo dice que hasta ahora ha verificado 45 homidios.

El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, luego de un consejo de seguridad, anunció una recompensa de hasta 200 millones de pesos por información que lleve a dar con el paradero de los responsables de la masacre.

Sin embargo, el movimiento de seguridad que hay ahora en Samaniego es otro de los motivos de desazón para Miguel López, quien, en medio de su dolor por la muerte de su pariente, dice que en el pasado ya les han hecho promesas de monitoreo constante al orden público y poco o nada se ha cumplido.