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PERSPECTIVAS ECONOMICAS DE 1999

El año entrante será uno de los peores de la historia reciente de Colombia en materia económica. El crecimiento y el empleo se estancarán y el dólar mantendrá un alto nivel de volatilidad. No obstante, del lado de la inflación habrá buenas noticias.

25 de enero de 1999

El año pasado esta revista le pidió a cuatro analistas nacionales y ocho firmas internacionales su visión sobre las perspectivas de la economía colombiana en 1998. Los resultados del ejercicio de proyección no fueron muy afortunados. Los expertos fallaron en sus proyecciones del crecimiento, la devaluación, el desempleo y la inflación. Sobre las primeras tres fueron demasiado optimistas. Proyectaron un crecimiento económico del 4,2 por ciento cuando la cifra real será inferior al 2 por ciento, estimaron que el desempleo rondaría el 12 por ciento y hoy es superior al 15, y ninguno anticipó que se modificaría la banda cambiaria. En cuanto a la inflación, por el contrario, pecaron de pesimistas. Solo uno creyó que se cumpliría la meta del Banco de la República que hoy está a punto de ser alcanzada. Este desenlace no es sorprendente. Pues la verdad es que nadie se imaginó que el año que termina sería tan malo como fue y que la incipiente recuperación de finales de 1997 se desvanecería rápidamente. Este año, por el contrario, las proyecciones son mucho más pesimistas en todos los campos menos el de la inflación. Y en este último caso el optimismo deriva fundamentalmente de que cuando se estancan el crecimiento y el empleo las presiones sobre los precios se reducen. Ojalá que, al igual que el año anterior, los expertos estén equivocados.