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Renta fija

Para 2002 se esperan unos tipos de interés bajos y estables. Pero la renta fija seguirá siendo importante para diversificar el riesgo.

5 de noviembre de 2001

El que compro un CDT de un millón de pesos el primero de enero del año pasado y lo renovó cada tres meses obtuvo a 31 de diciembre una ganancia de 126.500 pesos. Este rendimiento, equivalente al 12,6 por ciento, no está nada mal si se tiene en cuenta que —fuera de las acciones colombianas— ninguna otra alternativa de inversión tuvo un rendimiento superior.

Para 2002 se espera una relativa estabilidad en las tasas de interés. No obstante los analistas están divididos sobre la trayectoria que van a tomar este año que comienza los tipos de interés. Si la inflación continúa a la baja cabe esperar que haya descensos adicionales (aunque leves) en las tasas. Quienes tienen esta expectativa recomiendan comprar títulos de renta fija a plazos relativamente largos, para lograr mejores tasas, pues más adelante éstas van a bajar. Pero si la inflación para de bajar y empieza a subir las tasas tomarían una senda ascendente.

Es algo que podría ocurrir si, como espera la mayoría de los analistas, el dólar sube mucho en el segundo semestre del año. Al volverse más rentables las opciones de inversión en moneda extranjera las entidades locales subirían las tasas para retener a los ahorradores. De otro lado un dólar más caro, por la vía de un mayor precio para los bienes importados, presionaría hacia arriba la inflación. Una razón más para esperar una subida en las tasas es la demanda de crédito. Si ésta se reactiva, como posiblemente se dé sobre todo en el sector hipotecario, las entidades van a demandar más recursos, lo cual haría subir los tipos de interés.

Las opiniones están divididas entre quienes piensan que las tasas van a bajar por la menor inflación y los que esperan una subida. En lo que hay consenso, sin embargo, es en que los movimientos no serán bruscos. Así, la renta fija seguirá siendo la mejor opción para aquellos cautelosos que quieren conservar y aumentar un poco el valor de su inversión sin correr muchos riesgos.

Ahora bien, dentro de la renta fija el usuario tiene varias opciones. Puede invertir su dinero a la vista o hacerlo a término (uno, tres o más meses) para obtener un mayor rendimiento. Una de las opciones más recomendadas por los expertos para 2002 es comprar yankees, o bonos de deuda del gobierno colombiano emitidos en el exterior. Estos se han vuelto muy líquidos (quien los compra los puede vender fácilmente) y además ofrecen magníficas tasas. También hay quienes aconsejan comprar otros títulos del gobierno o bonos de deuda de compañías privadas con buena calificación de riesgo.

Estas últimas opciones pueden parecer un tanto lejanas para el pequeño ahorrador, pero no lo son tanto pues se puede tener acceso a ellas a través de los llamados fondos de inversión que ofrecen las comisionistas de bolsa o los fondos comunes que administran las fiduciarias. Ingresar a un fondo de estos puede ser tan fácil como abrir una cuenta de ahorros, y los hay para todos los gustos. Unos invierten en yankees, CDT u otros títulos (usualmente en una combinación de los anteriores). Para el usuario lo importante es que, con montos mínimos de hasta 200.000 pesos, se pueden obtener rentabilidades que en muchos casos superan las de un CDT.

En 2001 la renta fija en el país fue la segunda inversión más rentable a pesar de que las tasas de interés se mantuvieron bajas. Esto quiere decir que a las opciones más arriesgadas, como los dólares y las acciones en el exterior, les fue peor. Pero esa es precisamente la virtud de la renta fija: que es un refugio seguro en tiempos de turbulencia financiera, como lo fue el año pasado. Este año 2002 hay mejores perspectivas para el dólar y para las acciones en el exterior. No obstante el inversionista prudente no dejará de tener una porción importante de su portafolio en renta fija.