Golpes a mujeres trabajadoras les costaron $100 millones a dos empresas

Los golpes, tanto físicos como sicológicos de los que son víctima las mujeres, dentro de la violencia de pareja, aunque ocurren de puertas para adentro en el hogar, también le pasan factura a las empresas.

Con una metodología existente, conocida como Duvvury, tres investigadoras de la Universidad del Rosario concluyeron un singular estudio, para medir el ‘Costo empresarial de la violencia contra las mujeres en Colombia’.

La investigación, que por la llegada de la pandemia, solo se concentró en dos empresas, tiene hallazgos que poco se habían medido en el país, en torno al tema de la violencia.

Las investigadoras: Alma Beltrán; Claudia Cortés García, y Francoise Contreras, lograron establecer que las dos empresas en las que se hizo el estudio, el costo fue de $100 millones para la compañía, durante 2019.

Las cuentas hechas por las investigadoras parten de una indagación de variables que, generalmente, pasan desapercibidas en los estudios sobre violencia de pareja.

En primer lugar, para la elección de las empresas, según contó en SEMANA Francoise Contreras, se valoró el género, de manera que se estableciera un equilibrio en la muestra. Es así como, una de las compañías está inscrita en el sector del servicio de transporte, por lo cual, el personal que allí labora es mayoritariamente hombre (el 80%).

Para la segunda compañía escogieron una que tuviera más mano de obra femenina, lo que encontraron en el sector de comercio y producción de artículos para el cuidado personal (el 97% de trabajadoras eran mujeres).

Ambas empresas se ubican en la categoría medianas, es decir, tienen entre 600 y 800 trabajadores.

Singulares hallazgos

La cuantificación del costo para una empresa, de los efectos de la violencia de pareja en una trabajadora, tuvo en cuenta variables como el ausentismo; la tardanza en llegar al trabajo; el presentismo, es decir, está en el puesto pero rinde menos, se distrae. De igual manera, las investigadoras también sumaron el tiempo que toma la mujer trabajadora, del horario laboral, para ir a poner denuncias o atender judicialmente el caso de maltrato, cuando este se denuncia.

También se registra un porcentaje de trabajadoras afectadas por la violencia de pareja, que reportó inasistencia al trabajo por razones económicas: como había pelea y ella no tenía recursos para transportarse al sitio de trabajo, él la castigó, negándole la plata para ir a su lugar de empleo.

Otro efecto económico que también produce la violencia de pareja, según lo encontrado en el estudio, es la tendencia al alcoholismo, como puerta de escape al problema intrafamiliar, lo que, posteriormente, desencadena todas las deficiencias en el trabajo que debe realizar la afectada: más ausentismo, presentismo, inasistencia, entre otras.

“La violencia de pareja, en la mayoría de las ocasiones afecta el desempeño eficiente en el lugar de trabajo”, sostuvo la investigadora Contreras.

Y la reducción en la productividad no es solo por parte de la agredida, sino también del agresor. Por ello, a los costos también le suman el riesgo mayor de un accidente laboral.

La violencia causa situaciones que fueron calculadas y llevadas a números, los cuales, son el efecto económico para las empresas. Distracción; agotamiento; no productividad o baja productividad; dificultad para concentrarse en la tarea asignada.

Muy frecuente

Uno de los resultados del estudio, según contó Francoise Contreras, debe ser tenido en cuenta, para que las empresas también participen en la prevención y acompañamiento de la víctima de violencia de pareja.

Dentro de la muestra consultada por las investigadoras, el 41,2% de las mujeres ha sido agredida alguna vez en la vida; un 26,2% ha sido víctima de violencia en el último año.

En el caso de los hombres, el 20,9% ha agredido alguna vez en la vida; el 2,2% lo ha hecho en el último año.

Según las conclusiones del estudio, la violencia entre pareja, más frecuente, es la sicológica, seguida por la física, y en tercer lugar la sexual.