Banca para estratos bajos

Después del caos que se armó con las pirámides, muchos le están pidiendo al sistema financiero que haga mayores esfuerzos para ampliar la bancarización y así tratar de que menos gente caiga en las 'garras' de los captadores ilegales y el gota a gota. Pues bien, el gobierno, valiéndose de la emergencia social, obligará a los bancos a ofrecer servicios financieros baratos a los más pobres. Tendrán que 'meterse' en un nuevo producto llamado 'ahorro social' dirigido a la población del nivel 1 del Sisbén y a los desplazados, y deberán ofrecer créditos especiales en las zonas afectadas por las pirámides e impulsar las cuentas electrónicas, a través de datáfonos, para ampliar la presencia de la banca en una mayor parte del territorio nacional. El problema es que nada es gratis. Para que los bancos se comprometan con estos productos, el gobierno les dará a cambio algunas gabelas tributarias. Los exonerará del IVA y aranceles en las importaciones de datáfonos y los ingresos producto de las operaciones de créditos en las zonas afectadas por las pirámides no harán parte de la base gravable ya que este sector es el principal contribuyente de impuesto del país. El ex ministro de Hacienda Juan Camilo Restrepo dice que no cree que el instrumento de las exenciones y gabelas tributarias sea el más adecuado para generar resultados. "Si alguien tiene que hacer algo que lo haga o que lo induzca el Estado, pero que no lo premie con más exenciones tributarias".