EN LA OLLA

20 de mayo de 1991

POR FALTA DE PLATA, los latinoamericanos harán cama franca en la Exposición Universal de 1992 de Sevilla (España). Representantes de 16 países confirmaron que por la situación económica que atraviesa el continente, sólo Chile, Cuba, Mexico, Puerto Rico y Venezuela construirán pabellones. El primero que canceló su reserva para construir por su cuenta fue Argentina, en 1989. Y hace un mes Brasil hizo lo propio, al anunciar que se unirá al proyecto Plaza de Las Américas. Para asegurar la presencia de sus ex colonias, el gobierno español tuvo que sacarse del bolsillo 50 millones de dólares. La Moncloa justifica las críticas diciendo que si no hubiera sido por el apoyo latinoamericano, el Buró Internacional de Exposiciones hubiera adjudicado la sede a Chicago.