GORE FOR PRESIDENT

27 de mayo de 1996

Según dicen las malas lenguas en la capital de Estados Unidos, en la Casa Blanca se están desarrollando dos campañas políticas: la reelección de Bill Clinton y la elección de su vicepresidente, Al Gore, para reemplazarlo en 2000. El rumor nace no sólo de las intensas giras de Gore, que parecen trascender las de un simple segundo al mando, la contratación de un jefe de staff como Ronald Klain, un hombre conocido más por sus habilidades políticas que por las administrativas, y por algunos comentarios del propio Gore. Este, sin embargo, sabe que su suerte depende de la reelección de Clinton, y por eso no pierde su discreción de segundo al mando. Pero los conocedores dicen que Gore es el vicepresidente con mejor imagen y más influencia en los últimos años y que es razonable que quiera un ascenso.