Relojes eternos

LA MARCA de relojes Jung-hans,legendaria en Alemania por sus maquinarias de cucú,retoma la batalla de medición del tiempo. La compañía Scharamberg, productora de la marca, lanzó un reloj de pulso que no pierde un segundo en un millón de años. Para lograrlo, trabaja con una antena que toma la señal de las torres transmisoras de la hora oficial que exisdten en varios países. Si el reloj se atraza, un chip corrige el desface.
Los modelos oscilan entre 200 y 6.000 dólares, y ya hay pedidos. En Estados Unidos el lanzamiento se demorará: como la antena transmisora de la señal horaria, en Colorado, tiener poca potencia,los cientificos de Schrmberg trabajan en una mejor antena receptora para que los estadounidenses no pierdan ni un segundo.