Sultanes quebrados

25 de septiembre de 1995

Que la vida da muchas vueltas, parece ser hoy la frase más dolorosamente recordada por la aristocracia de Indonesia. La razón es que los sultanes, que hasta hace sólo 50 años ejercían una autoridad indiscutida en sus regiones, habren hoy sus palacios a las visita de los turistas, para poder solventar con el valor de las entradas los gastos de su mantenimiento. El proceso de deterioro de su poder comenzó en 1945 con la proclamación de la República y el inicio de la guerra contra el poder colonial holandés. La cosa ha llegado a tal punto, que recientemente el gobierno y algunos miembros de casas reales desfilaron a caballo acompañados por soldados que vestían coloridos uniformes tradicionales y portaban fusiles del siglo XVII así como dagas y escudos antiguos. Aunque se trataba de revivir el interés por el patrimonio cultural, no faltaron quienes consideraron que los desfiles eran una afrenta para los orgullosos antepasados de los sultanes.