UN PASO AL MAS ALLA

10 de junio de 1991

EN PERU, PAIS AZOTAdo por la violencia política y las calamidades naturales, dos episodios independientes demostraron que falta de soluciones en el mundo material, las gentes recurren a lo sobrenatural. Uno de ellos fue la visita del curandero brasileño Joao de Dios. El famoso espiritista afirma haber curado del cáncer a la actriz Shirley McLaine, y tiene fama de realizar operaciones quirúrgicas sin anestesia y con herramientas burdas. El gobierno, presionado por la comunidad médica, prohibió que el personaje realizara sus intervenciones, pero ello no impidió que atendiera a impresionantes multitudes en Lima.
La gente, venida de todas partes del país, pasaba la noche esperando turno. Por los mismos días el llanto de una imagen de la Virgen de Fátima, en una humilde casa de El Callao, produjo un furor acrecentado con la aparición de algunas, más en Chapi, que, aseguran los testigos, lloraron sangre. La Iglesia católica ha sido mucho más fuerte en sus críticas contra el brasileño, que en sus cautas apreciaciones sobre las lágrimas de yeso. Para algunos suspicaces lo de las vírgenes es una trama urdida por la inteligencia militar, que trataría de explotar la susceptibilidad del pueblo, para que al menos oIvide sus tragedias.