Cibertaques: bombardeando nuestra democracia

La reunión entre el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden y su homólogo ruso, Vladimir Putin, que tuviera lugar hace pocos días en Suiza, es de lejos él acontecimiento internacional más importante de 2021. Los ciberataques fueron uno de los ejes centrales de la conversación, pues la democracia no solo de Estados Unidos sino de buena parte del mundo está en juego.

Estos ataques inclinaron la balanza en las elecciones presidenciales de 2016 en las que perdió Hillary Clinton, tal como lo comprobaría el Senado de ese país en un momento en el que imperaba la mayoría republicana. En las elecciones de 2021 sucedió algo similar, solo que Biden pudo ganar a pesar de la injerencia del Kremlin, según informes de inteligencia norteamericana.

Los ataques hacia Estados Unidos en la actualidad son variopintos, van desde la obstaculización del suministro de carne a todo el país como pudo evidenciarse a principios de junio, pasando por el cierre temporal de la red de oleoductos que proporciona el 45 % del combustible a toda la zona este del país. El director del FBI ha llegado a equiparar estos ataques con los del 11 de septiembre, por lo que solicita una respuesta similar a los mismos. También afirma que su país “tiene que aceptar la magnitud de este problema”.

La presencia rusa también estuvo presente en el brexit y en la independencia de Cataluña. La desintegración de la Unión Europea no le cae nada mal a Putin, teniendo en cuenta las fuertes sanciones que le ha impuesto en el pasado, como ocurrió como consecuencia de la anexión de Crimea. Colombia es un país que no es ajeno a esta realidad, existiendo fuertes evidencias de ataques realizados desde Rusia.

El actual ministro de Defensa de Colombia en declaraciones recientes manifestó que se habían detectado ciberataques desde ese país. A esto hay que añadir que en diciembre el Gobierno nacional tuvo que solicitar el retiro de dos funcionarios de la Embajada rusa en Bogotá, por espiar infraestructura militar y recursos minerales. Estas acciones no son hechos aleatorios. Además de Rusia se han detectado ataques desde Venezuela.

Sobre esto último cabe recordar que en diciembre de 2018, Nicolás Maduro advirtió al Gobierno colombiano de manera textual : “les vamos a dar una lección que no van a olvidar en mil años”. Para Maduro no hay nada al azar y muy seguramente esto hace parte de una estrategia en contra de nuestra democracia, pues aquí no está en juego el futuro de Colombia en las próximas elecciones, es un plan trasado para décadas, o en lo que a ellos respecta para siempre.

Una de las grandes preocupaciones del mundo actual es la problemática nuclear. Desde Nagasaki, es uno de los fantasmas que acompañan al mundo. La era de control nuclear esta aun protagonizada por Estados Unidos y Rusia, e incluso existe un acuerdo en ese sentido con Irán que justamente se está intentando salvar en este momento. Los ciberataques, tal como lo manifestó el director del FBI son equiparables a los ataques del 11 de septiembre y debe dárseles una respuesta urgente. No da espera, de no hacerse algo puede verse con el tiempo efectos más nefastos que un ataque nuclear no sólo a nivel material sino institucional. Están bombardeando nuestras instituciones.

Con relación a Colombia debemos estar preparados. Los servicios de inteligencia de nuestro país se han sentido ausentes en esta crisis por lo que debe desarrollarse toda una política de Estado en ese sentido. La prioridad de este asunto es del mismo calado de la atención que se le está dando a la pandemia o al huracán Iota. Puede sonar exagerado, pero no lo es en absoluto, estamos hablando de una amenaza semejante a un ataque nuclear o al 11S. La respuesta del Gobierno colombiano, al igual que lo es del estadounidense, debe ser contundente.