Tendencias digitales

En América Latina y, de hecho, en todo el mundo se ha experimentado un fenomenal auge digital gracias a la pandemia. Muchas organizaciones y personas se vieron obligadas a migrar al mundo tecnológico para continuar sus actividades y no verse gravemente afectadas.

Una gran cantidad de personas como consumidores hemos contribuido a que ahora cerca del 80 % de contenido se consuma por medios digitales, por lo que se proyecta que, siendo reactivos a las tendencias de mercado, en el año 2023 la inversión en publicidad promedio representará hasta el 50 % del presupuesto de las grandes firmas a nivel global.

Pero en la medida en que el mundo sigue moviéndose, las tendencias tecnológicas no se limitan a reuniones virtuales y el uso de aplicativos que faciliten el trabajo remoto. Allí, la consultora McKinsey desarrolló una metodología única para identificar las tendencias más relevantes en materia de ventaja competitiva e inversión.

Si bien puede que algunas no sean las más novedosas del mercado, frente a otras que sí están en la vanguardia y plenitud de su auge, en conjunto son las que obtienen el mayor capital de riesgo, producen la mayor cantidad de solicitudes de patentes y generan las principales implicaciones sobre cómo y dónde competir.

La primera de ellas contempla a la automatización y la virtualidad como la combinación más poderosa en materia de tecnología. Allí la robótica, el internet industrial de las cosas, y la impresión 3D o 4D se combinan para agilizar las tareas rutinarias, para mejorar la eficiencia operativa y los índices de tiempo de comercialización.

Al respecto, se espera que para 2025 más de 50 billones de dispositivos tecnológicos estarán conectados al internet de las cosas, se verá un incremento en la instalación de robots industriales (600.000 para el próximo año), y muy probablemente cerca del 10 % de los procesos de manufactura actuales serán reemplazados para 2030 en todo el mundo.

Otras tendencias se relacionan a la industria de la computación y el futuro de la programación. En épocas en las que se demanda una mayor velocidad de conexión (5G) y la capacidad de obtenerla a grandes distancias, también ha entrado en extraordinario auge la tendencia del software 2.0 en la cual los programadores son reemplazados por redes neutrales e inteligentes, que tienen la capacidad de desarrollar software. El impacto en ello se compara a una entrada futura de los autos autónomos: algo gigantesco y descomunal.

Asimismo, se prevé la entrada con fuerza de las tecnologías limpias y una clase de “bio-revolución”; tendencias que prometen un impacto significativo en diversas economías y que, sin duda alguna, afectará nuestras vidas y el curso que han tomado muchas industrias, desde la salud y la agricultura. Biomáquinas, biomoléculas, biocomputación y biosistemas significarán su potenciamiento y crecimiento en el desarrollo de procesos.

Esto representará una mayor incidencia y aplicabilidad en energías renovables, vehículos eléctricos, una mejor y autónoma gestión en la energía del hogar, tratamiento de aguas residuales, etc. Toda una revolución que le espera a las futuras generaciones en aras por ser amigables con el medio ambiente.

Aunque en Colombia el rezago, frente a las economías desarrolladas, parece evidente, los líderes digitales han enfocado bastantes esfuerzos por analizar un poco el panorama actual que traerá grandes desafíos en el sector con el impacto del covid-19.

En los estudios realizados por Equinix, se estima que al menos el 60 % de los líderes digitales en Colombia han acelerado sus planes de transformación digital. No obstante, más del 90 % afirmó que la digitalización de una infraestructura en tecnología e innovación era la prioridad más grande.

Las tecnologías de la información y la comunicación tienen un gran desempeño en modelos B2B (entre negocios) y los B2C (del negocio al consumidor final). Todo el tiempo estamos en un ciclo de demanda de plataformas y aplicativos robustos, que día a día se someten a constantes actualizaciones para adaptarse a la medida de las expectativas.

Una situación que se nos ha dado tan compleja requiere también de soluciones complejas. Allí las inversiones en el sector digital han aumentado para fortalecerse, e intentar dar un modelo de adaptación a nuestra realidad. Uno de los sectores más importantes ha dotado de flexibilidad y adaptación a muchísimos de los sectores de la economía, y las inversiones se vienen haciendo cada vez más sustanciosas.

Hoy muchos hablan en repetidas ocasiones de la inteligencia artificial como foco de la tendencia digital a mediano o largo plazo. Pero a muy corto plazo se han evidenciado que varias de estas tendencias van a jugar un rol trascendental. Por supuesto, la inteligencia artificial no puede hacerse a un lado, pero por ahora no se considerará como protagonista dado su bajo nivel de madurez, en comparación con las tendencias objeto de análisis.

La tecnología ha reducido mucho más las barreras de la disrupción digital. Clave que en el ecosistema empresarial colombiano se logre que, desde más microempresas hasta las grandes compañías, sea en bien o servicio que presten, vayan migrando sus procesos e involucrando herramientas que permitan dar este salto digital. Muchas veces el temor a invertir en tecnología, por el miedo a los altos costos, tapa la visión de lograr retornos altos que recuperan las inversiones, la sostenibilidad y el crecimiento para las compañías usando las herramientas digitales.

Clave el apoyo estatal (Ministerios principalmente), de las cámaras de comercio, y de los propios empresarios, parar asimilar el uso productivo que se puede sacar de las tendencias digitales en las que el mundo se mueve hoy día, en beneficio de los empresarios.