Constructora Capital cumple todas sus metas a pesar del coronavirus

El sector de la construcción empezó 2020 con una perspectiva muy positiva y un comportamiento destacado. Las ventas eran las más importantes de los últimos siete años y toda la industria sin excepción respiraba un ánimo positivo.

Y en Constructora Capital, una de las firmas destacadas del sector, después de registrar en 2019 unos resultados excepcionales se preparaban para un año mejor. La firma vendió $482.000 millones en esa vigencia y esperaba seguir creciendo en estos 12 meses.

Pero llegó marzo y la situación se complicó por la pandemia. “Cuando se ordena el aislamiento, se frena la actividad de construcción. El problema lo podemos dividir en dos partes: lo que es netamente construcción y lo que es comercialización”, explicó Pablo Echeverri, presidente de la constructora.

En el primer aspecto, el impacto se sintió de inmediato. Las autoridades prefirieron tomar precauciones para impedir un mayor impacto entre la población. El resultado fue el cierre total de operaciones para esta firma.

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No obstante, como la construcción es uno de los sectores que más mueve empleo e impacta favorablemente la economía, las autoridades encontraron necesario iniciar la reapertura en esta industria, antes que en otros sectores.

Así se hizo y lo que quedó en evidencia fue la necesidad de establecer protocolos de bioseguridad que garantizaran las operaciones sin generar nuevos focos de propagación.

Gracias al trabajo articulado entre los distintos ministerios, como el de Vivienda y Salud, el gremio y las autoridades locales, la construcción fue una de las primeras industrias en reactivarse en el país, lo que ocurrió el 27 de abril pasado.

Así las cosas, paulatinamente, los proyectos de Constructora Capital, tanto en Bogotá y la Sabana, como en Medellín y su zona metropolitana, arrancaron nuevamente. Eso garantizó cumplir las promesas de entrega a los clientes que habían confiado en la constructora a lo largo del año pasado. No obstante, quedaba aún por resolver el tema comercial, pues en el nuevo escenario era clave promover la venta de vivienda sin que las personas visitaran los proyectos.

Para superar el inconveniente, la compañía le puso tecnología al asunto y creó ambientes virtuales para que los interesados hicieran visitas guiadas a través del computador.

“Fortalecimos nuestra estrategia de mercadeo y la volcamos hacia medios digitales. Un cliente nos visita por un medio digital y busca una cita por videoconferencia. Tenemos toda una serie de herramientas con videos 360 y la ayuda de drones para mostrar el entorno y la localización del proyecto. Y logramos también realizar procesos como la cotización e informar las disponibilidades de apartamentos, todo por medios digitales y sin imprimir papeles”, explicó el directivo.

La estrategia sirvió. En un principio las ventas cayeron de manera importante, pero a partir de mayo, junio y julio recuperaron terreno y ya se encuentran muy cerca de alcanzar el presupuesto que tenían a principio de año.

Con 2.770 unidades vendidas a junio, esperan a final del año alcanzar la meta.

Para Echeverri la clave está, primero, en la capacidad de reacción como compañía y, segundo, en la articulación con las autoridades que entendieron la importancia del sector y lo priorizaron en las actividades de reapertura y en la política pública, pues la estrategia de subsidios fue relanzada con mayores recursos.

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Los resultados se notan en todo el sector: en agosto, las ventas de vivienda de interés social registraron un récord al alcanzar 15.000 unidades, el dato más alto para un mes de agosto en la historia de este mercado en Colombia. En general, la construcción ya recuperó niveles de actividad similares a los de la prepandemia.

“Esta situación nos ha enseñado muchísimo a trabajar en equipo, no solo en las empresas, sino también a lograr ese trabajo ágil, diligente y eficiente entre el sector privado liderado por los gremios y el gobierno nacional y los gobiernos municipales y departamentales. La enseñanza es el trabajo organizado rápido y con resultados inmediatos”, explicó.

Destacó que la pandemia también mostró nuevamente el valor de la solidaridad, por cuenta del apoyo entre gremios y la población en general. “Los apoyos del sector privado a las entidades públicas para atender la situación de salud muestran que los empresarios están comprometidos. El país va a quedar muy fortalecido y eso gracias a la solidaridad del sector privado y a las medidas del sector público. También fue claro el compromiso de los trabajadores con las empresas”, dijo.

La compañía ya ha logrado retomar el ritmo y al menos este año las ventas van a regresar a los niveles de crecimiento esperados desde comienzo de año. Eso significa que, a pesar de haber enfrentado una pandemia, esta compañía puede decir que no perdió el año.

Además, el sector aprendió una lección fundamental sobre la importancia de adaptarse rápidamente a esta clase de choques; también fue evidente que la tecnología se convirtió en un aliado, inclusive para actividades tan importantes y complejas como vender viviendas.

La Constructora Capital muestra que, si bien han sido tiempos duros, hay sectores y empresas que lograron sortear las dificultades con una buena estrategia y salieron fortalecidas. Un caso de estudio para replicar en diversos sectores económicos.