Alarmas encendidas

En dos hechos diferentes, tanto el Comité Internacional de la Cruz Roja como la Misión de Observación de la OEA encendieron alarmas sobre la persistencia de la violencia en muchas regiones. El Cicr dijo en su informe en Suiza que las víctimas actuales son “invisibles”, pero que siguen siendo sometidas al desplazamiento, las minas, los abusos sexuales y la muerte. La OEA, por su parte, pidió que se tomen medidas para evitar el reclutamiento de menores, contener las acciones de las bandas emergentes y acelerar la reparación a las víctimas.