Alianza Azul-Uribista

La elección de los magistrados del Consejo Nacional Electoral dejó claro que las mayorías del gobierno en el Congreso no son tan sólidas y apabullantes como en el primer mandato de Santos. Tras dos sesiones plenas del Parlamento la Unidad Nacional no solo redujo su total control sobre el tribunal electoral sino que, por primera vez fueron elegidos representantes de partidos abiertamente opositores. La nueva distribución se dio como una reacción de la coalición oficialista a la alianza entre los conservadores y el Centro Democrático que amenazaba con conseguir cuatro cupos.

La Unidad Nacional pasó de tener nueve magistrados a cinco: Luis Bernardo Franco y Alexánder Vega, de La U; Héctor Elí Rojas y Emiliano Rivera, del Partido Liberal y  Yolima Carrillo, de Cambio Radical. El Polo en alianza con los Verdes, el Mira y el santismo en un logro histórico consiguió espacio para Armando Novoa, abogado y exmilitante del M-19. Los otros tres restantes –Felipe García, Carlos Camargo y Ángela Hernández–   fueron elegidos por la alianza entre azules y uribistas.  Al final, ni el gobierno ni los uribistas lograron lo que querían, pues en el CNE las decisiones se toman mínimo con seis votos. Sin embargo, la Casa de Nariño y la coalición de gobierno sintieron por primera vez los efectos de la unión entre el Partido Conservador y el uribismo. ¿Se repetirá esa coalición para otros temas álgidos de la agenda legislativa?