"COLCULTURA FOMENTA LA DIMENSION SEÑORERA DEL ARTE"

Con motivo de la inaguración de su exposición "Edipo y las Parcas", SEMANA entrevistó al pintor y crítico Galaor Carbonell, para hablar un poco sobre el sentido de esta exposición dedicada al "ego, la madre y su muerte", y para preguntarle su opinión sobre la tendencia actual del arte colombiano.
SEMANA:¿Qué relación tiene esta exposición con la muerte de su madre?
GALAOR CARBONELL: Toda. La exposición tiene básicamente que ver con la muerte de mi mamá; quise convertir la muerte en un festival medio pagano. La exposición tiene que ver con Las Parcas, mis obras están hablando constantemente de la muerte a través de una poética.
S.: ¿Qué es más importante en este momento actual de su vida como pintor: la técnica o la temática?
G.C: Más que la dimensión técnica o de oficio, me interesa la dimensión poética que puedan alcanzar mis pinturas. Me interesa básicamente lo que uno pueda hacer de una carga literaria con unos cuadros.
S.: Usted es profesor de tiempo completo en la Universidad de los Andes, comentarista semanal de esta revista, editor de la revista "Arte en Colombia", y dicta con frecuencia conferencias y seminarios. ¿A qué horas saca tiempo para pintar?
G.C.: Trabajo 24 horas al día. Trabajo, trabajo y trabajo. No tengo otras diversiones. Lo único que me entretiene y me gusta es mi trabajo.
S.: En sus artículos para SEMANA parece existir la constante de una guerra fría contra los estamentos de la cultura oficial en Colombia. ¿Existe esta guerra?
G.C.: Me ha tocado librarla, ante lo que está pasando en tantos campos de la cultura colombiana, que están perfectamente abandonados, porque Colcultura se ha convertido en una entidad que protege los eventos de salón e ignora la cultura popular, que es donde está la actualidad. En mis artículos para SEMANA, yo estoy tratando de rescatar estos sectores.
S.: ¿Qué está pasando actualmente con el arte en Colombia?
G.C.: Hasta hace dos años en Colombia había un movimiento muy fuerte pro-vanguardias, proconceptualismo. Pero desde hace unos 5 o 6 años empezó a ocurrir en el mundo un retorno a las formas tradicionales: a la pintura como pintura. De pronto la facción pro-conceptual quedó completamente desbaratada, y el regreso a lo tradicional se dio en forma tan avasalladora que se ha creado una gran confusión entre lo que es el saludable regreso a lo tradicional y lo que es la basura. Esto ha permitido que medren personajes eminentemente comerciales que no tienen quien los controle.
S.: ¿Cómo se arregla esto?
G.C.: Pues ahí es donde debería entrar Colcultura. Ofreciendo guía y consulta en esos capítulos, y no recogida sobre sí misma y dedicada al fomento de la dimensión señorera del arte.