Home

Enfoque

Artículo

Efecto dominó

11 de octubre de 2008

El fallo de segunda instancia que el Consejo de Estado está a punto de emitir, en torno a la sentencia que declara la nulidad de la elección en 2006 del contralor de Cali, Miguel Erick Piedrahíta, tiene a muchos caleños con los pelos de punta y soñando con el efecto dominó de dicha sentencia. El motivo es sencillo: quienes esperan con ansiedad que se confirme el mencionado fallo afirman que los alcances del mismo se extenderán hacia otros funcionarios, como por ejemplo los 11 concejales que votaron favorablemente la elección del contralor Piedrahíta. Aseguran que de confirmarse la sanción, los ediles podrían incurrir en severas inhabilidades para ejercer cargos públicos. La perla de este problema es que entre esos ediles se encuentra el hoy gobernador del Valle, Juan Carlos Abadía Campo. Como si la tensión no fuera suficiente, la elección de la actual contralora de Cali, Alma Carmenza Erazo, también fue demandada y con los mismos argumentos de su antecesor, presunta inhabilidad. La funcionaria apeló y también está a la espera del nuevo fallo.