Enfoque político

Sigue en vilo la decisión que debe tomar la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia respecto a la tutela radicada por el detenido senador Álvaro Ashton. El congresista alega que las actuaciones adelantadas por la Sala Penal en su proceso deben ser anuladas, pues esta sección ya no tendría competencia para investigarlo ni juzgarlo. Afirma que, por el contrario, ello le correspondería a las salas de Instrucción y Juzgamiento pendientes de crear por orden de una ley promulgada en enero. El lío de fondo va mucho más allá de Ashton. De prosperar su tutela, con la misma lógica se desmoronarían en cascada todos los expedientes adelantados contra congresistas y otros altos dignatarios en el último semestre.

Entre esos casos, quedarían en entredicho el expediente contra el expresidente Álvaro Uribe, los senadores capturados Aída Merlano, Bernardo ‘Ñoño’ Elías y Musa Besaile, el exgobernador Alejandro Lyons, el excongresista David Char, el exfiscal Gustavo Moreno y muchos más. Una decisión en favor de Ashton, además, desencadenaría un choque de trenes dentro de la Corte Suprema, pues la Sala Civil estaría reversando la determinación de la Sala Penal. Los magistrados de esta sección decidieron que hasta tanto los nuevos togados de la llamada primera instancia no fueran nombrados y posesionados, su competencia frente a los aforados seguiría vigente. Han pasado ya varias semanas sin que los siete magistrados de la Sala Civil logren ponerse de acuerdo. Este miércoles lo intentarán una vez más. Su decisión podría tener efectos cardiacos en la alta corporación.

Metidas de pata

No había pasado ni una semana después de la elección de Iván Duque y ya algunos congresistas del Centro Democrático estaban dando de qué hablar. La senadora Paloma Valencia trinó el 20 de junio que la Corte Suprema estaría preparando una retaliación contra Álvaro Uribe por cuenta de la propuesta del presidente electo de unificar las cortes. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia desmintió a la senadora por medio de un trino. SEMANA se comunicó con Valencia para saber de dónde había obtenido esa información y se negó a dar declaraciones.

Por su parte, el también senador del Centro Democrático José Obdulio Gaviria trinó que un senador de izquierda y militantes de este sector estarían planeando “secuestrar” / “capturar” a Álvaro Uribe. Y Alfredo Ramos, senador del mismo partido, también hizo noticia con el madrazo que le espetó a la senadora del Partido Verde Claudia López, en medio de una plenaria.

Según pudo saber SEMANA, en el almuerzo con los órganos de control y las altas cortes con Iván Duque, este señaló que no tiene capacidad de controlar lo que dicen los senadores.

Listo el marco para la desmovilización de las bacrim

El Congreso aprobó el proyecto que permite la desmovilización masiva de integrantes de bandas delincuenciales y otorga herramientas a la justicia para adelantar este proceso de forma colectiva, y ahora pasa a sanción presidencial. Una vez el presidente lo firme, los grupos criminales –como el Clan del Golfo– podrán recibir los beneficios que ya establece el Código Penal, pero ahora colectiva y no individualmente. Esto simplificaría las audiencias y aceleraría el proceso de cualquier banda criminal que se quiera entregar.

Con ese nuevo marco jurídico, ahora queda avanzar en el proceso de desmovilización en el que, a nombre del gobierno, vienen trabajando el senador Iván Cepeda y el vicepresidente Óscar Naranjo, entre otros.

DE FAJARDO A PETRO

Una investigación del Centro Nacional de Consultoría evidencia que los votantes que estuvieron con Sergio Fajardo en primera vuelta privilegiaron en la segunda a Gustavo Petro por encima de Duque. En los 33 municipios en los que ganó Fajardo en primera vuelta, Petro subió 1.392.013 votos, mientras que Duque sumó 840.511 sufragios y el voto en blanco alcanzó 227.966. Según la investigación, si las elecciones hubieran tenido lugar solo en esos municipios, las elecciones habrían quedado así: Petro al frente con 51 por ciento, seguido por Duque con 42 por ciento, y 6 por ciento en blanco.

Así votaron las zonas más afectadas por el conflicto

Gustavo Petro ganó en muchas de las regiones que siguen en conflicto después de firmados los acuerdos de paz –en su mayoría porque son corredores del narcotráfico–. Allá también había ganado el Sí en el referendo por la paz. Esto demuestra que en los lugares donde el conflicto perdura esperan que los acuerdos de paz sigan adelante para que la inseguridad no se agudice.