“No quiero ser indiferente”

¿Por qué le termina a usted interesando la pobreza?

No me gusta vivir en un país donde la mayoría no tiene oportunidades. A mí desde niño me ha marcado mucho esa realidad social. Y siempre he anhelado cambiarla, pero no desde la política.

¿A qué conclusiones llega después de entrevistar a personalidades del país?

Una es que en Colombia todavía no hay un consenso sobre las causas de la pobreza, ni sobre las soluciones. Otra es que, aunque hemos progresado porque la pobreza ya es parte del debate político, las medidas no han sido efectivas. Y una más es que la mayoría de la gente, especialmente en las clases altas, son indiferentes al problema.

Habló con Uribe y Santos. ¿Coinciden en algo?

Sí, en que una causa principal de la pobreza es la violencia.
 
¿Es el libro una manera de reaccionar a los escándalos de su padre?

Mi papá se equivocó y yo no tengo por qué heredar sus problemas ni sus enemigos. Yo quiero hacer mis cosas, no quiero ser indiferente y me interesa la labor social.