La oferta de Uribe a las Farc

Algo nuevo le está pasando por la cabeza al presidente Álvaro Uribe con las Farc. Ya son dos los ofrecimientos que les ha hecho en las últimas semanas, aunque uno muy distinto al otro. El domingo día de elecciones, antes de pronunciar cualquier otra frase, Uribe les ofreció el diálogo: “Llamo a la Farc para que revisen su conducta, para que analicen la vocación democrática de los colombianos, para que consideren la posibilidad de un proceso de paz serio y urgente”. Y al finalizar la semana, después de un Consejo de Seguridad, repitió que estaba dispuesto a que los guerrilleros presos accedieran a los beneficios de justicia y paz si se desmovilizaban y ayudaban a la desmovilización de compañeros del “monte”. El anuncio no tiene novedad porque de hecho, el mismo gobierno ha utilizado ya ese mecanismo. Sería interesante, sin embargo, que se tratara de una estrategia para intentar dejar a las Farc sin el objeto de su más ferviente deseo: el canje. Si los guerrilleros presos aceptaran desmovilizarse, ¿por quiénes cambiarían las Farc a los secuestrados políticos? Eso variaría las condiciones para un acuerdo humanitario. Aun así, el mensaje parece más encaminado a conseguir un efecto inmediato porque no faltarán los que no quieran volver al monte o a la clandestinidad y prefieran aceptar la oferta. Ojalá, eso sí, que sí sean guerrilleros de verdad a los que se aplique la ley.