Una televisión para no ver

"Ni tanto que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre", reza el refrán popular que cobra toda vigencia con la decisión de la Comisión Nacional de Televisión (Cntv) de eliminar la publicidad del alcohol y el tabaco para la televisión. El origen de la medida es sano y además corresponde a una tendencia mundial que en especial busca alejar a los más jóvenes de elementos nocivos para la salud. Sin embargo, llegar al extremo de prohibir de tajo la transmisión de cualquier certamen por cualquier modalidad de televisión de espacios que tengan comerciales o sean alusivos a estos productos es sencillamente absurdo. Esto porque hay grandes compañías tabacaleras y de licores detrás de certámenes de trascendencia mundial y de alto interés en Colombia. Por ejemplo, el Mundial de Fútbol y la Fórmula 1. ¿Qué va a hacer la Cntv, por ejemplo, cuando salga el carro de Michael Schumacher que patrocina Marlboro? ¿O cuando Ronaldo en el Mundial anote un gol en la portería que está delante de la valla de la cerveza Budweiser? La presidenta encargada de la Cntv, Adela Maestre, ha dicho que los canales por suscripción pueden negociar la señal limpia, pero eso es imposible. Y ni hablar de la máxima pasión de los colombianos que sufren y gozan con la Selección Colombia, patrocinada por Águila, y semana a semana siguen el campeonato profesional de fútbol, la Copa Mustang. Aunque está bien intencionada, la medida debe considerar todos los factores involucrados.